Edición semanal
Basada en materiales de Majón Meir

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Pesaj     21 de Nisan 5785     Shviy

 


El cuento y nuestra vida
Rav Asher Bujbut

 

El encuentro vivo con las festividades de Israel, y sobre todo la fiesta de Pesaj y la lectura de la Hagada deben hacer despertar en nosotros una moraleja para nuestros días, la situación que vivimos ahora, en toda generación. Esa observación importante encontramos en Guidon – que al otro día de la noche de Pesaj se levanta, hace lo que hace y pregunta cuestiones importantes. ¿Cómo está relacionado con la situación que él vive, en la época de los Jueces? – Cuando los midianitas gobiernan sobre Am Israel (el Pueblo de Israel), cuando ellos viven un terrible temor hasta tal punto que tienen que esconderse en fortalezas y cuevas, y los midianitas devastaron toda la producción de la tierra y no dejaron sustento para Am Israel.

La vivencia del relato de la Salida de Egipto no es para Guidon un cuento nostálgico popular. Sino que él recibe fuerzas de ese cuento y continua con las preguntas de la Noche del Seder: “Le contestó Guidon; señor mío, si el Señor está con nosotros, entonces ¿cómo es que nos ha sobrevenido todo esto? ¿Dónde están todas Sus maravillas que nos han contado nuestros padres, diciendo; ¿no nos hizo subir el Señor de Egipto? Más ahora el Señor nos ha desechado y entregado en mano de Midian” (Shoftim 6:13). La pregunta de Guidon es muy aguda y difícil, como explica Rashi: “Era Pesaj. Le dijo; ayer mi padre me leyó el Halel y le escuche decir lo que pasó cuando Am Israel fue sacado de Egipto, ¿y ahora nos ha abandonado? Si nuestros antepasados eran Tzadikim (justos), que nos haga por merito de ellos. Y si eran malvados, como les hizo a ellos maravillas por bondad, así también nos haga a nosotros. ¿Dónde están sus maravillas?” (Rashi, allí).

Y en efecto, el relato de la Salida de Egipto en oídos de tu hijo, y del hijo de tu hijo debe actuar algo profundo en los hijos y hacerlos despertar, “ayer mi padre me leyó el Halel y le escuche decir lo que pasó cuando Am Israel fue sacado de Egipto”. La vivencia de la Noche del Seder de cada familia, expresando el relato según las distintas costumbres singulares de cada comunidad en el reencuentro de los alejados de Am Israel, debe hacer despertar en nosotros una profunda contemplación, ¿cómo todo eso está relacionado con nuestra vida? Hasta que finalmente con el recitado del Halel llegará el gran cuestionamiento: ¿En qué se diferencia esta noche, en cuanto a la revelación de D’s en nuestra generación? ¿Dónde están todas Sus maravillas? ¿Por qué, si D’s está dentro nuestro y nos ha sacado de Egipto, nos han encontrado estos acontecimientos? Y no te apresures a contestar, no sea que digas que se trata de otra generación y es distinto. “Si nuestros antepasados eran Tzadikim (justos), que nos haga por mérito de ellos. Y si eran malvados, como les hizo a ellos maravillas por bondad, así también nos haga a nosotros”. Queremos continuar viendo a nuestro Rey. Esa contemplación le confiere a Guidon fuerzas y arrepentimiento, “el Señor está contigo” (Shoftim 6:12) – sabe que siempre D’s está contigo, y por el hecho que tú lo buscas mereces ser llamado “varón esforzado y valeroso” (Shoftim 6:12), y tu deseo con tus preguntas de cercanía de D’s con Su pueblo genera un mérito, “anda con esta tu fuerza, y tú salvarás a Israel de mano de Midian” (Shoftim 6:14). Y de aquí en más, en base a esa contemplación tú eres un emisario, “Yo te envío” (Shoftim 6:14). Como explica el comentarista Metzudat David “por la fuerza del mérito que nombraste para Israel, podrás salvarlos” (Metzudat David, Shoftim 6:14). Toda la misión de Guidon emana de la contemplación de la Noche del Seder, hay un orden en el mundo y D’s nunca abandona a Su pueblo. Y eso es lo que aprenden nuestros sabios respecto a las guardias de la noche. También durante la noche, cuando tú ves sólo oscuridad, y la galut (el exilio) es insinuada por la oscuridad y la noche, como aprenden del versículo “‘me ha asentado en tinieblas, como los muertos de largo tiempo’ (Eija 3:6) – dijo Rabí Irmya, ese es el Talmud de Babilonia” (Sanhedrin 24A). También la noche tiene un orden, cuando se relevan las guardias. Eso lo aprenden de Guidon, “‘y llegó Guidon y cien hombres con él al extremo del campamento, al principio de la guardia media’ (Shoftim 7:19). Aprendieron; “‘Guardia media’, es decir hay una guardia antes y después” (Brajot 3B). Por ello, el que busca a D’s vincula como el cerrojo medio entre la gueulá (Redención) de Egipto y nuestra gueulá ahora, como dice el profeta “como en los días que saliste de la Tierra de Egipto, le haré Yo ver maravillas” (Mija 7:15).

 


Rav Shlomó Aviner

Hijos que se alejaron

Rav Shlomó Aviner

 

Pregunta: Tenemos hijos que se han alejado de la Torá, y nuestro corazón se parte día a día. A pesar de que les entregamos la mejor educación del mundo, nos sentimos culpables. ¿Cómo sobrellevarlo?

Respuesta:

1. Su corazón se parte, en efecto, es algo que duele mucho, es terrible, hace despertar el llanto.

2. Junto con ello, ustedes no son culpables. Toda persona tiene libre albedrio. Ustedes hicieron todo lo que pudieron, y el resto no está en sus manos.

3. El Primer Hombre y nuestra matriarca Java se encontraban en un nivel muy alto, y a pesar de ello su hijo Kain asesinó.

4. Nuestro patriarca Avraham tuvo ocho hijos: Itzjak, Ishmael y seis hijos de Ktura. Siete de ellos salieron al mal camino. Y a pesar de ello, D’s dijo: “Pues lo he conocido porque él encomienda a sus hijos y a su casa después de él que guarden el camino del Eterno, para hacer rectitud y justicia” (Bereshit 18:19). O sea que D’s alabó su educación, y a pesar de ello hay libre albedrio.

5. Nuestro patriarca Itzjak y nuestra matriarca Rivka dieron a luz a Esav.

6. Los hijos de David, uno de ellos violó a su hermanastra, otro asesinó, y otro organizó una revolución que cobró muchas víctimas.

7. El rey Jizkiahu no quería casarse. Le explicó al profeta Ishaya que vio con su inspiración Divina que saldrán de él hijos incorrectos. Le dijo Ishaya: “¿Por qué te entrometes en los secretos de D’s? Lo que te fue ordenado, debes cumplirlo. Y D’s hará lo que le parece” (Brajot 10A). Y en efecto, de él salió Menashe, el malvado.

8. En resumen: La persona hace lo que puede, y el resto no está en sus manos. Hay libre albedrio. Hay decretos Divinos. Que D’s los bendiga por toda su santa labor, y finalmente todo será para bien.


Shabat

Meorot HaShabat

 

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.

Kidush

Comido o bebido antes del Kidush

De momento que comenzó el Shabat la obligación del Kidush recae sobre toda persona enseguida, y a partir de ese momento nuestros sabios prohibieron comer o beber hasta después de haber hecho Kidush, incluso probar un poco de agua está prohibido[1].

En vísperas de Shabat, cuando comenzó “Bein HaShmashot” [luego de la puesta del sol] de momento que ya es quizás noche recae el Shabat sobre la persona, y tiene prohibido comer o beber hasta que haga Kidush[2].

El que recibe el Shabat más temprano

El que recibe el Shabat antes de la puesta del sol, e incluso cuando es temprano [es decir, a partir de Plag HaMinja en más, como fue explicado anteriormente] recae sobre él la kdushá (santidad) del Shabat enseguida, y a partir de ese momento tiene prohibido comer o beber hasta que haga Kidush[3].

Según la costumbre que la mujer enciende las velas de Shabat, ella recibe el Shabat con ese encendido, y tiene prohibido comer o beber luego de haber encendido las velas hasta que haga Kidush[4].

Comido de un pequeño antes del Kidush

Pequeños que tienen que comer antes de haber escuchado el Kidush, lo tienen permitido [ya sea por la noche o por la mañana], incluso si ya han llegado a la edad en que es obligación educarlos. Y a pesar de que está prohibido darle de comer a un pequeño algo que no es kasher, incluso sólo según nuestros sabios, de todas formas antes del Kidush está permitido alimentarlos, porque tratándose de una prohibición poco severa como esa[5], cuando hay una necesidad para la salud del niño, nuestros sabios no lo prohibieron[6].



[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 271 inciso 4, Mishná Brurá inciso 11)
Pero está permitido lavarse la boca con agua antes del Kidush, porque la intención no es disfrutar del agua (allí, Mishná Brurá inciso 13, Kaf HaJaim allí inciso 20)

[2](Allí, Mishná Brurá inciso 11, Kaf HaJaim inciso 21)
Y a pesar de que está prohibido comer o beber antes del Kidush, si comió sin haber hecho Kidush, e incluso si ya terminó su comida y no desea comer más, no debe esperar hasta la mañana para hacer Kidush antes de la comida, sino que debe hacer Kidush enseguida en la noche (allí, inciso 7, Mishná Brurá inciso 37). Y véase Jaiei Adam (clal 6, inciso 26) que por lo menos debe comer un poco para que sea “Kidush donde se come”. Y Kaf HaJaim (allí, 271 inciso 49) escribió que debe comer kazait de pan.

[3](allí, Mishná Brurá inciso 11. Véase 261 inciso 2). Y si quiere hacer Kidush y comer ahora, y rezar Arvit por la noche, si todavía no ha llegado media hora antes del momento en que se puede rezar Arvit, lo tiene permitido (allí, Mishná Brurá). Y así también escribió Kaf HaJaim (allí, inciso 22) y agregó que “según el Ari”zl no es correcto hacer así, porque invierte el orden”. Véase allí.
[4](allí inciso 4, Mishná Brurá inciso 11)
Y véase en Minjat Shabat Jadasha 77 inciso 2 y Ahavat Shalom inciso 11 y Daat Torá 271 inciso 4 en cuanto a una mujer que está sedienta y necesita beber.

[5]Véase acotación próxima.
[6](allí 269, Mishná Brurá inciso 1 citando Maguen Avraham). Y véase Majatzit HaShekel (allí) que explica que tratándose de una prohibición que no es del objeto en sí, como nevela o similar, sino que las circunstancias generan la prohibición, una prohibición poco severa como esa nuestros sabios la permitieron cuando es necesario para la salud del niño. Y véase también Shuljan Aruj HaRav (allí, inciso 3). [Según eso se puede permitir comer o beber sólo lo que es necesario para la salud del niño, y no golosinas o similares]. Y véase Maguen Avraham (allí) que de momento que el niño tiene permitido comer, está prohibido negárselo y hacerlo sufrir.