Parashat
Vaielej 5 de Tishrei 5766 No 1528
Shabat Shuva
Desea
el arrepentimiento
Rav Ioram
Eliahu (reimpresión)
Uno de
los principales obstáculos que le impiden a la persona
arrepentirse
sinceramente es el pensamiento que sus pecados son tan grandes y
pesados que no
es posible arrepentirse de ellos, y seguramente su Tshuvá
(arrepentimiento sincero) no será aceptada. “El que pretende
arrepentirse teme
que sus pecados ya lo han desahuciado y su esperanza cesó” (Orot
HaTshuva
16:2). Pero si analizamos nuestras fuentes encontramos que no hay
ningún pecado
que impida el arrepentimiento, e incluso de las situaciones más
duras y las
caídas más profundas la persona puede elevarse,
arrepentirse y acercarse a su
D’s.
El rey
Menashé fue una de las personas que enojaron a Su Creador de la
peor forma.
Colocó un ídolo en el Eijal, asesinó a su
abuelo, el profeta Ishaya
(véase Iebamot 49B) y más. En su combate contra Ashur fue
tomado en cautiverio,
y cuenta el Midrash (Ialkut Shimoni, Melajim Bet) que lo
colocaron en un
barril de cobre, le perforaron agujeros, y prendieron fuego por debajo.
De
momento que entendió que está por morir, comenzó a
rezarle a todos los ídolos
que conocía, y no hubo ningún ídolo que
existía al que no le rezó. Cuando vio
que no le sirvió, se acordó de lo que aprendió
cuando era un niño, y dijo: Yo
recuerdo que mi padre me enseñó el versículo
“cuando estés en aprietos y todas
estas cosas te hayan encontrado al final de los días, entonces
retornarás hasta
el Eterno, tu D’s” (Dvarim 4:30). Le rezaré a D’s. Si me
responderá, muy bien.
Y si no, eso demuestra que es como todos los otros ídolos a los
que le recé
antes. Es impresionante: ¡Incluso en ese momento, él no se
dirige a D’s con fe
plena, sino que plantea condiciones y pone a prueba a D’s, si
escuchará su rezo
o no! Continúa el Midrash y dice que los ángeles
del cielo cerraban los
ventanales para que su rezo no se eleve hasta D’s, y le dicen:
Señor del Mundo,
¡¿una persona que colocó un ídolo en el Eijal
acaso puede arrepentirse?!
Les dijo D’s: Si no acepto su arrepentimiento, cierro la puerta frente
todos
los que pecan y se arrepienten. Es decir, si no aceptaré su Tshuvá
estoy
cerrando la puerta frente a todos los que pecaron y desean
arrepentirse, que
pensarán que hay pecados de los que no es posible arrepentirse.
Por ello,
continúa el Midrash diciendo: ¿Qué hizo
D’s? Cavó un túnel por debajo de
Su Trono de Honor, y escuchó su rezo.
Aprendemos
de ello que incluso una persona malvada, D’s no lo permita, como
Menashé,
cuando se dirige a D’s sabiendo que es el Señor del Mundo, y
puede perdonarle,
entonces D’s acepta su arrepentimiento, la perdona y le ayuda a
acercase a Él.
El
Ramba”m (Hiljot Tshuvá, cap. 4) enumera 24 cosas que
obstaculizan la Tshuvá,
las detalló y parte de ellas escribió que D’s no le deja
a la persona
arrepentirse, y parte que cierran la puerta del arrepentimiento, y
más. Y en la
última halajá escribe: “Todas ellas… a pesar de
que obstaculizan el
arrepentimiento, no lo impiden sino que si la persona se arrepiente de
ellas es
considerado un Baal Tshuvá, y tiene parte en el Mundo
Venidero”. Y así
nos enseñó el Rav Kuk zt”l: “Cuando se llega a
arrepentirse se debe saber que
no hay nada que lo impida. Incluso todas esas 24 cosas que obstaculizan
el
arrepentimiento, enseguida cuando la persona decide arrepentirse de
ellas, ya
no se lo impiden” (Orot HaTshuva 14:3).
Con ese
conocimiento nos presentaremos frente a nuestro D’s en ese gran
día, Kadosh
y terrible, y sabremos que también si pecamos mucho, y nos
arrepentimos, y
volvimos a pecar, D’s es misericordioso, y en ese día sobre todo
espera nuestro
rezo, nos entrega otra oportunidad, y nosotros con vergüenza e
imploraciones
volveremos a pedir “recuérdanos para la vida, Rey que desea la
vida, y séllanos
en el Libro de la Vida, por Ti, Señor de la Vida”.
Y
nuestros queridos hijos, que se enfrentan día a día con
los ataques del Ietzer
HaRrá (mal instinto) y sus artimañas, y experimentan
muchas caídas a veces
duras y descorazonadoras, una de las artimañas del Ietzer
HaRrá es
hacerle perder las esperanzas, diciéndoles que si has hecho tal
o cual pecado,
ya no tienes valor, no puedes arrepentirte, una persona como tú
ya no es
recibida en arrepentimiento. Nuestro papel es enseñarles que el Ietzer
HaRrá
les miente, y toda persona que vuelve a D’s sinceramente su
arrepentimiento es
recibido, porque D’s es misericordioso, “que perdonas nuestras
iniquidades y
las faltas de Tu pueblo, la Casa de Israel, y que borras nuestras
trasgresiones
año tras año, oh Rey de toda la tierra, que santificas a
Israel y el Dia del
Perdón” (Rezo de Iom Kipur).
Gmar
Jatima Tova (que
sean sellados para bien).
Perdón
y absolución
Rav
Shlomó Aviner
Pregunta:
Si
produje daño monetario a mi compañero y le pagué,
¿alcanza con ello?
Respuesta:
No.
Hay que conciliarse con él.
Pregunta:
Si
alguien me ofendió y no me pidió perdón,
¿se lo
debo recordar?
Respuesta:
Si
te escuchará. Por supuesto, hablarle con amor.
Pregunta:
La
formulación que decimos en estos días, perdón y
absolución, ¿es adecuado?
Respuesta:
No.
Es grotesco. Si no lo has ofendido, no es
necesario pedir perdón. Y si lo has ofendido, no alcanza con dos
palabras, sino
que se lo debe conciliar en forma autentica.
Pregunta:
¿Se
puede decir, si te he ofendido te pido perdón?
Respuesta:
También
es grotesco.
Pregunta:
Si
alguien me ofendió, y no pidió perdón en forma
seria, ¿debo perdonarle?
Respuesta:
No.
Pregunta:
Si
hay alguien que no le perdono, ¿cómo puedo decir en
Kriat Shma antes de dormir “yo perdono a todo el que…”?
Respuesta:
La
intención es a todos los demás.
Pregunta:
Si
una persona no pidió perdón, ¿le debo perdonar de
todas formas?
Respuesta:
No
es obligación. Es una medida de los piadosos
perdonarlo de todo corazón.
Pregunta:
Si
pedí perdón varias veces, pero mi compañero se
niega a perdonar, ¿qué hacer?
Respuesta:
Tratar
a través de una tercera persona mediadora. Y si
has pedido perdón en forma apropiada según la seriedad de
la ofensa, alcanza
con ello.
Meorot
HaShabat
El cometido
de esta sección es
familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat.
Cada uno
debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en
cuanto a los
detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat,
y no
limitarse a lo escrito en esta sección.
Las comidas
de Shabat
La tercera
comida
Se debe
cuidar mucho de cumplir la tercera comida de Shabat[1].
E
incluso si está saciado, comerá por lo menos lo necesario
para que sea
considerado una comida[2],
como fue
aclarado anteriormente.
No llenarse
en el almuerzo
Se debe
prestar atención y cuidarse en el almuerzo de
no comer demasiado, para que pueda comer la tercera comida. Y si se
llenó
demasiado, a veces si se obliga a comer en la tercera comida es “ajila
gasa”
[cuando se come estando saciado y sin sentir ningún placer de
ello], que no es
considerado comer[3].
El momento
de la tercera comida
El momento
en el día en que se debe comer la tercera
comida comienza cuando llega el momento del rezo de Minja, es
decir,
media hora zmanit después del mediodía[4].
De momento
que se ocultó el sol está prohibido comer o
beber hasta que se haga Habdalá sobre la copa de vino[5],
por lo
tanto debe comenzar la tercera comida antes de la puesta del sol[6].
Tercera
comida antes de Minja
Si
comió la tercera comida antes del momento en que se
puede rezar Minja, no cumplió con la mitzva de
la tercera comida[7].
Pero si
comenzó a comer antes del mediodía, y continuó
comiendo también después que llegó el momento de Minja,
cumplió con su
obligación, si comió la cantidad necesaria luego de media
hora después del
mediodía[8].
De
todas formas, en un principio no lo hará, sino que
comenzará la comida luego de
haber llegado el momento de Minja[9].
[1]Porque con esa comida es notorio el honor del Shabat, ya
que en todo
día común se come por la noche y por el mediodía,
pero cuando come una tercera
comida [que no hay todos los días] añade honor al Shabat.
Por ello, se debe
cuidar de cumplir con esa comida, y recibe recompensa por la cena y el
almuerzo
como si también ellos los hubiese hecho en honor del Shabat
justamente (Kaf
HaJaim 291 inciso 3, citando a Majzik Braja inciso 1).
[2](291 inciso 1, Mishná Brurá inciso 2).
[3](allí inciso 1, Mishná Brurá inciso
4, Kaf HaJaim inciso 3).
[4](allí inciso 2).
[5](299 inciso 1, Mishná Brurá inciso 1).
[6]Y de momento que comenzó a comer antes de la
puesta del sol, puede
continuar también después (Shuljan Aruj, allí).
Y véase más (267, Mishná Brurá inciso 5)
que de momento
que la obligación de las tres comidas se aprende del
versículo que dice
“cómanlo hoy”, hay que cumplirla justamente en el día de
Shabat.
Si se demoró y no comenzó la tercera comida antes de la
puesta del sol, véase Mishná Brurá (299 inciso 1)
que cierto tiempo después de
la puesta del sol todavía debe comenzar, a pesar de que se puso
el sol. Y véase
allí (Shaar HaTziun inciso 2, Biur Halajá comienza
mishetejshaj) que
escribieron por qué es así. Una de las razones es que de
momento que es para
cumplir una mitzva, se puede fiar en la opinión de Rabí
Iosi que “bein
hashmashot” no comienza con la puesta del sol sino que más tarde
[según ello,
cuando todavía no pasaron diez minutos luego de la puesta del
sol, debe
comenzar a comer].
[7](291, inciso 2).
Cuando vísperas de Pesaj cae en Shabat, escribieron los
poskim que se debe dividir el almuerzo en dos para cumplir con la
obligación de
la tercera comida, según la opinión de los que dicen que
se debe comer pan en
ella. Y luego de Minja comerá carne y pescados o frutas, y de
esa forma cumple
con todas las opiniones (444, Mishná Brurá inciso 8).
[8](Shuljan Aruj HaRav allí, inciso 2. Mishná
Brurá allí, inciso 7. Kaf
HaJaim allí, inciso 10). Y en ese caso no se determina
según el principio de la
comida (allí, Mishná Brurá).
[9](Shuljan Aruj HaRav allí).