Shabat Jol HaMoed 19 de
Nisan 5777
Rav Lior
Engelmann (reimpresión)
Esta Matza (pan ácimo) que comemos
en Pesaj simboliza entre otras cosas la humildad (Zohar, Jelek
Bet
40:2). Ella no se infla por encima de sus dimensiones verdaderas, no
pretende
verse más grande y más llena – como el pan con el que nos
encontramos en los
demás días del año, cuyo volumen es grande, y su
apariencia es ostentosa. Para
que realmente podamos darle las gracias a D's en Pesaj – por
habernos
elegido de entre todos los pueblos, y habernos sacado de Egipto – y
para
adoptar auténticamente la buena virtud de la fe, debemos
primeramente adquirir
la humildad. Sin ella, no seremos capaces de aceptar
auténticamente el yugo
Divino, y sin ella por supuesto que no podremos decir con todo el
corazón
frente a las bondades que nos prodiga D's: "¡Suficiente!" (Hagada
de
Pesaj).
La brecha entre la apariencia arrogante
del pan y la forma sencilla de
La levadura simboliza un factor que llega
"de afuera" y produce la fermentación y la ilusión de
grandeza. La
masa no fermentó en base a la harina y el agua propia, no es por
su cualidad
que se ve tan ostentosa, sino que es por algo que no es de ella, por la
levadura que toda su acción es inflarla.
La persona que se mira a sí misma con
sinceridad, que ve qué es realmente y cuál es su vida no
se "infla"
con facilidad: Por el contrario, se colma de humildad. Justamente por
conocerse
a sí mismo y por ser consiente en forma precisa de su valor –
eso lo hace verse
en este mundo en su dimensión auténtica, sin que se eleve
a sí mismo por encima
de su verdadero valor. La soberbia surge cuando la persona no es
consciente de
quién es realmente. Por lo general, ella llega "de afuera":
Alguna
fuerza externa hace "fermentar" en la persona la sensación del
orgullo. Puede ser su situación económica o el
título del que fue merecedor, a
veces es un cargo que es acompañado de autoridad, o relaciones
con personas
importantes, o sencillamente alguna aptitud de la que fue merecedora.
Los
aplausos y el respeto que recibe del entorno son la levadura que
provoca la
fermentación. Todos ellos y muchos otros se transforman en
levadura, que agrandan
e inflan a la persona, hasta tal punto que se olvida a sí misma
y se encandila
– y su soberbia se eleva hasta el cielo…
Pero a veces la causa la fermentación
llega de por sí misma, cuando se deja de amasar la masa – y
también tratándose
de las personas, a veces la inactividad es la fuente de la gran
soberbia. El
amasado es símbolo del movimiento y la superación, es
símbolo de la labor
interna de nuestra "masa", cuando cada uno intenta elevarla lo mejor
posible. Mientras la masa sea amasada por nuestras manos, no hay
peligro que
fermente: Es como si ella fuese consiente que todavía tiene
mucho por trabajar
y aprender, superarse y cambiar, y no puede descansar pensando que ya
ha
llegado a su destino. Pero cuando se deje descansar la masa, y ella
sentirá que
ya ha llegado a su meta – fermentará, se enorgullecerá y
se inflará. Cuando la
persona siente que ha llegado a su descanso y a su meta – esa es la
trampa del
orgullo.
La pregunta básica en Pesaj, es
"¿qué tiene de diferente?". Pretendemos aclarar en
qué somos
diferentes en comparación al año pasado, intentamos
verificar si todavía
seguimos amasando nuestra masa – nos esforzamos en el corregimiento de
nuestras
virtudes, en nuestro culto a D's – o quizás ya hemos comenzado a
aceptarnos a
nosotros mismos como somos, lo que nos hace dejar de "amasar". Pesaj
cae en el primer mes del año, el principio de la
renovación, que le exige a la
persona encontrarse toda su vida en el "amasado", una vida de
movimiento perpetuo con el objetivo de cambiar y renovarse
continuamente, el
amasado que encierra el secreto de la humildad.
No nos dejemos engañar por el recostado
al lado izquierdo de la noche del Seder: No se trata de un
descanso
falto de acción, que trae consigo el pecado de la soberbia. Se
trata de un
recostado para cumplir la voluntad de D's, nuestro amo. Por el
contrario, de
esa forma expresamos que estamos dispuestos a amasar con alegría
sin fin la
masa de nuestra vida, una vida de sirvientes de D's cuya labor es
también su
felicidad.
Rav
Shlomó Aviner
Respuesta:
1. En
primer lugar no está permitido el contacto sin cariño.
Según el Beit Iosef en
opinión del Ramba”m también un contacto sin
cariño está prohibido por
2. De
todas formas no está claro que dar la mano a una mujer no sea
considerado un
contacto de cariño. El Gaón (genio del estudio de
3. De
todas formas el Gaón, el Rav Aharenberg caviló en
cuanto a devolver la
mano a alguien que se la extendió, quizás no es
considerado manifestación de
cariño, aunque lo sea por parte del que la extendió,
cuando el que se la
devuelve lo hace por modales. Pero finalmente descarta eso, y concluye
que no
se puede fiar en ello, y también la mujer tiene cierta
intención de cariño, y
la hace trasgredir. Agrega que no se debe temer de avergonzar, porque
lo
correcto es alejar a los trasgresores del pecado, y puede que se lo
avergüence,
como dice el Ramba”m que si no hay más remedio, hay que
avergonzar al
pecador para salvarlo del pecado (Hiljot Deot 6:8). No haremos algo
así, pero
por supuesto que no le ayudaremos a hacer una trasgresión,
incluso si por eso
se avergonzará.
Y en
general, él escribe que eso no es avergonzarla, sino que ella se
avergonzó a sí
misma. Concluye que en la práctica, no se debe permitir de
ninguna forma (Shu”t
Dvar Ioshua Bet, Even HaEzer 15). Y también tratándose de
parientes cercanos (véase
Ramba”m, Hiljot Isurei Bia 21 6).
Pregunta: ¿Acaso según lo que dijo el Rav
Fainshtein que está permitido viajar en el subterráneo a
pesar que es difícil
cuidarse de no tocar a nadie, se puede concluir que se puede estrechar
la mano
a una mujer cuando ella se la extiende?
Respuesta:
¿Qué
relación hay?
El Gaón, el Rav Fainshtein mismo escribió que es
difícil permitir
devolver la mano, Shu”t Iguerot Moshé Even HaEzer 1 56, 4 32 (y
una vez el Gaón,
el Rav Reuben Fainshtein le preguntó a su padre, el Gaón,
el Rav Moshé
Fainshtein: ¿Se puede vender el jametz a una gentil? Le
contestó: No hay
problema con vender el jametz a una gentil, y así
acostumbraron en
Odessa, ya que tratándose de una gentil no decimos que sus
ganancias son de su
esposo. Y en cuanto a darle la mano – o que no lo haga, o alguna mujer
judía lo
haga. Masoret Moshé, pág. 405. Entonces, está
claro que el Gaón, el Rav
Moshé Fainshtein no permitió darle la mano a una mujer,
incluso cuando es
necesario).
Pregunta:
¿Si no se le
devuelve la mano a la mujer quizás ella se ofenda, y hay que
tomar en cuenta
sus sentimientos?
Respuesta:
No es considerado
avergonzado del prójimo, por el contario, ella se
avergüenza a sí misma. Es
semejante a una persona que se hospeda en casa de un amigo, y le sirven
comida
que no es kasher, y si se negará el anfitrión se
avergonzará mucho.
¿Acaso por ello está permitido? Y también si un
Rav le pide a su alumno que se
case con su hija, y el alumno se niega, lo que ofende al Rav.
¿Acaso por ello
el alumno tiene la obligación de casarse? Está prohibido
avergonzar al prójimo
tomando la iniciativa, pero no cuando el otro hace algo que lo ofende a
sí
mismo, porque el amigo no consiente negándose a hacer algo.
Ocurrió
una vez que el Gaón, el Rav Ovadia Iosef recibió
el Pras Israel y le hicieron una
ceremonia de recibimiento, y cuando
Una vez se le hizo un recibimiento con la
reina de Inglaterra, ella le ofreció la mano, pero él no
se inmutó y no movió
las manos de su cuerpo, a los ojos de todo el reinado y las
cámaras de
televisión. Por la tarde recibió una disculpa del reinado
por haberlo avergonzado,
ya que revisaron en los libros de los protócolos y encontraron
que la reina no
debe ofrecer la mano a Rabinos judíos.
Pregunta: ¿Acaso
en las halajot del recato no se toma en cuenta la ofensa de las
mujeres,
el odio, el apartado? ¿No se teme que si los religiosos se
apartarán del
público y se comportarán tan extrañamente ello
alejará a las personas de
Respuesta: D’s
no lo permita. Por el contrario, el recato cuida del honor de las
mujeres. Así
escribe el Rav Kuk en su libro Midot HaReaya: “La medida del
recato
genera muchas bondades en el mundo, y de esa forma se hace merecedora
de
aplazar por ella cosas que en sí serían buenas, pero de
momento que por el mal
instinto de la persona y su debilidad abrirán brechas en el
recato, que es lo
que le da existencia al mundo espiritual y material… el recatado sabe
que no es
por el odio que se aleja e instituye cercas, sino que por la bella meta
general”. Y así está escrito en el libro LeNebujei
HaDor: “El alejado
del recato de la mujer de su prójimo no llega en base a la
envidia, D’s no lo
permita, sino que en base a la pureza del espíritu y la kdushá
(santidad)
de las buenas virtudes y las acciones. Porque de la misma forma que el
acercamiento y las señales de amor son buenas y adecuadas para
agradar y elevar
la vida familiar, cuando fluyen por parte de un hombre ajeno pueden
oscurecer
la vida familiar y su pureza. Y junto con nuestro alejamiento de una
mujer
ajena, la amamos como persona, y nos esforzamos por su bien”
(pág. 104).
Pregunta: ¿Entonces,
qué se debe hacer cuando una soldada le extiende la mano?
Respuesta: Por
supuesto, en todos esos casos se debe proceder con mucha inteligencia,
para
disminuir todo lo que se pueda la vergüenza del prójimo,
como por ejemplo hacer
una reverencia frente a ella, para demostrar que se la respeta, y pedir
perdón
por no estrechar la mano. Y respecto a todos esos casos fue dicho:
“Tú le
entregas a la persona sabiduría”.
El cometido de esta sección es
familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat.
Cada uno
debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en
cuanto a los
detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat,
y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Kidush
Es una mitzva positiva de
Aparte de la obligación de recordar
en la formulación del Kidush alabanzas y
santificación del día de Shabat,
también hay que mencionar
De la misma forma que se hace Kidush
en la noche del Shabat, también se hace Kidush
en la noche de
todo Iom Tov (día festivo), porque también esos
días son considerados
como Shabat[5].
Y todas las reglas del Kidush de Shabat se acostumbran
también en
Iom Tov, sólo que la obligación en Shabat
tiene rigor de
[1]“Recuerda el día de Shabat para
santificarlo” – santificarlo cuando el día se santifica
(Rashba”m Psajim 106A).
[2](Psajim 106A, Ramba”m capítulo 29 de Hiljot Shabat,
Halajá 1. Sma”g
precepto positivo 29). Y en el Sefer HaMitzvot del Ramba”m (positiva
155)
escribió: “Nos ordenó santificar el Shabat y recitar
palabras a su entrada y
salida, recordaremos en ella el elevado nivel de ese día, y lo
diferenciaremos
del resto de los días anteriores y posteriores. Y a eso se
refirió cuando dijo
‘recuerda el día de Shabat para santificarlo’, es decir,
recuerda su santidad y
nivel. Y esa es la mitzva de Kidush”.
[3](Psajim 117B, Ramba”m allí halajá 2).
Y véase Minjat Jinuj (mitzva 31 inciso 5) que escribió
que
la obligación de recordar
Y a pesar que también en los días comunes toda noche hay
que recordar
[4]Tur inciso 271, y así dice: “Y el Ramba”n
escribió que el Shabat mismo
es recuerdo de
[5]Ramba”m capítulo 29 de Hiljot Shabat, halajá
18.
[6](271, Mishná Brurá al final del inciso 2. Kaf
HaJaim allí inciso 6).
Véase Pri Megadim (Eshel Avraham, 296 al final del inciso 11)
que cita a Shita
Mekuvetzet que Kidush y Habdalá en Iom Tov es obligación
según