Alumbrar

basado en materiales de Majón Meir

Parashat Vaiera     15 de Jeshvan 5772     No 842

El clamor de los oprimidos
Rav Lior Engelmann

Nos acostumbramos a pensar que las personas de Sdom ya habían rebosado el vaso de los pecados, nos enseñaron que su maldad era tan grande que D’s se vio obligado a destruir ese lugar. El Netzi”v (Rav Naftali Tzvi Iehudá Berlín) de Voloshin en su comentario a la Torá nos alumbra ese episodio de otro ángulo.
La decisión de exterminar a las personas de Sdom fue antecedida por un clamor: “Y dijo D’s, el clamor contra Sdom y Amora es grande, y su pecado se ha agravado mucho. Descenderé y veré si han hecho según el clamor suyo que ha llegado hasta Mi, entonces los exterminaré, y si no, lo he de saber” (Bereshit 18:20-21). Los que claman son las víctimas de la injusticia y maldad que reina en Sdom, el clamor llega de los oprimidos por sus leyes, “el clamor de los asesinados” como dice el Netzi”v en su comentario “Arjev Dabar”, o “el clamor de los explotados por el público” como dice en su otro comentario, “Hamek Dabar”.
Por ese clamor que subió al cielo, D’s resuelve destruir a Sdom, incluso si las acciones de los agresores todavía no justifican un castigo tan severo. El dolor de las víctimas es tan preciado e importante para D’s que ha decidido castigar a los agresores, de todas formas. D’s “escucha” el clamor, y “desciende” para verificar que sus acciones son realmente tan severas como el sufrimiento de los agredidos, “y si no, lo he de saber”, si todavía no se merecen el exterminio según sus acciones, D’s sabrá cómo hacerlos pecar más aún, hasta el punto que el decreto de exterminio sea justificado. “Sabré lo qué hacer para que se merezcan el exterminio, como realmente hizo, cuando D’s envió a los ángeles para que los habitantes de Sdom les intenten hacer maldades, y de esa forma el veredicto será totalmente justificado… pero ya fue decretado, por el clamor” (Hamek Dabar 18:21).
El Señor del Mundo no cometerá una injusticia, y por ello cuando resulta que todavía no se ha colmado la medida para destruir a Sdom según sus acciones, Él se encarga que suceda todo el episodio de los ángeles, cuando luego de ello el castigo es justo. Pero el blanco fue señalado anteriormente, luego que el clamor de los agredidos fue escuchado en lo alto…
El clamor de la víctima tiene una influencia decisiva en el juicio de D’s. Egipto comienza a pagar la esclavización de Am Israel (el Pueblo de Israel) sólo después que su clamor se elevó al cielo. También los versículos que hablan del préstamo al pobre dicen: “Si tomares en prenda el vestido de tu prójimo, se lo devolverás antes de ponerse el sol, porque ése es su único abrigo, es su vestido para sus carnes, ¿en qué habrá de dormir? Pues acontecerá que si clamare a Mi, Yo oiré, porque soy misericordioso” (Shmot 22:25-26). D’s le da gran importancia al sufrimiento de sus criaturas, y ningún clamor producto del sufrimiento es desatendido.
A menudo debemos tomar resoluciones en el plano social o judicial en temas donde hay una confrontación entre el dolor de la víctima y la necesidad de aliviar el castigo del agresor. Por supuesto que el tema es complejo, y hay muchos aspectos a tomar en cuenta, pero por lo menos un principio básico surge del estudio del episodio de Sdom: “Ya fue decretado, por el clamor”. El dolor del herido tiene mucha potencia, más aún que los aspectos a tomar en cuenta en cuanto al agresor.
A veces en nuestra vida nos vemos obligados a hacer cosas necesarias y justas, a raíz de las cuales le es producido dolor a otros. También en este caso el estudio del clamor puede enseñarnos respecto al cuidado y sensibilidad que debemos tener en nuestras acciones en esos casos, para disminuir el dolor que producimos. Así se expresó Rav Tzadok de Lublin: “Hay que cuidarse de no producir ningún dolor a ninguna criatura, incluso por alguna mitzva… y ordené a todos los que acosan, incluso los encargados de la limosna… incluso la piedra con la que apedrean a un condenado a muerte, o el árbol donde lo cuelgan tendrán que rendir cuentas…” (Tzidkat HaTzadik 175).
No hay ningún dolor que escape a ojos de D’s, sus oídos están abiertos para escuchar los clamores de los angustiados, cuanto más nos comportemos de acuerdo a ello, seremos merecedores de la plasmación del rezo: “Acepta nuestra súplica y escucha nuestro clamor, Tú que conoces los secretos” (rezo Ana VeKoaj).

Ser un pueblo en su tierra
Rav Zeev Karov
(Publicado en Rosh Iehudi, edición 252)

Todos nos alegramos viendo a Guilad Shalit regresar a su casa. Es muy emocionante ver un soldado que estuvo en cautiverio 5 años, vuelve andando de por sí mismo y entra a su casa. Todos nos alegramos también por la manifestación de hermandad dentro de Am Israel (el Pueblo de Israel): Am Israel no se desentendió, y no olvidó al soldado durante todos los años que estuvo en cautiverio.
Junto con eso, tenemos la obligación de repetir otra vez el principio fundamental en el que se basa nuestro renacimiento nacional y nuestra vida en esta tierra.
Después de dos mil años de galut (exilio) volvimos a nuestra tierra. La diferencia esencial entre la galut y la gueulá (Redención) es que en la galut pensamos y actuamos como individuos particulares y comunidades – no como pueblo. Las resoluciones y acciones en la galut son siempre tomadas buscando el bien del individuo particular y la comunidad. En la época de la gueulá debemos subir otro peldaño, a un nivel más alto y más auténtico: Vivir como pueblo.
Lo que forjó al Estado de Israel fue la convicción que los individuos particulares están dispuestos a sacrificar su vida - si es necesario - por el pueblo y por el país. Esa es la plena Ahavat Israel (amor por todo el Pueblo de Israel). Sin ese principio básico el Estado de Israel no hubiese sido fundado. Sin ese principio básico no podremos continuar existiendo aquí.
¿Cómo podremos explicar a nuestros hijos por qué deben enrolarse en el ejército, y no cuidar de sí mismos y de su vida particular?
Bien sabemos a través de nuestro profundo conocimiento y nuestra experiencia que justamente esa forma de pensar procura el bien para el individuo particular y fortalece su seguridad. La forma de pensar de la galut no trajo con ella más seguridad ni larga vida para los particulares. Por el contrario, justamente desde que fue fundado el Estado de Israel y fue colocada la preocupación por la nación y el país en la cúspide de la escala de valores, los particulares gozan de más seguridad. La cantidad de personas que perecieron en el Estado de Israel y fuera de él es decenas de veces menor que la situación que vivimos en la galut, cuando cada uno se preocupaba de sí mismo y de su comunidad, y estábamos expuestos a los pogromos sin número, ya sea de personas o naciones.
Es natural que padres de víctimas de atentados y padres de soldados cautivos expresen sus sentimientos. Es correcto que la organización "Arbaa Imaot" de a conocer su posición. Pero no puede ser que decisiones nacionales sean tomadas en base al punto de vista del individuo particular, o un punto de vista sentimental.
Esa forma de pensar no sólo que es baja y limitada, también nos daña como pueblo. Debilitar la nación para fortalecer al individuo particular finalmente lo daña también como particular. La fortaleza y la seguridad auténticas se encuentran en nuestra vida como pueblo, no como particulares.

Midreshet Majón Orá

Centro de estudios de Torá para chicas en
español y portugués.
¡¡Están todas invitadas!!
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Rav Binyamin Aizner zt"l
Rav Shlomó Aviner

Luego de muchos suplicios, se elevó al cielo el alma pura de esa gran persona, el Rav Binyamin Aizner z”l.
Porque, ¿quién es una gran persona? El que reconoce la grandeza de las más grandes personas, y se dirige por sus caminos. Y así hizo nuestro compañero, Rabí Binyamin, que toda su vida se dirigió tras nuestro gran Rav, y acostumbraba a decir en su humildad: “Para hablar respecto a las grandes personas, la persona misma tiene que ser grande. Y de momento que no soy una gran persona, no hablaré respecto al Rav Kuk, sólo intentaremos estudiar juntos sus escritos”.
Y en efecto, el Rav Binyamin consagró toda su vida a ser el portavoz del Rav Kuk, nada más y nada menos, un portavoz delicado, entendible, cálido, profundo.
Toda su vida enseñó el libro “Orot”, enseñó fe, amor por la fe y paciencia para con el estado. Toda su vida explicó con una paciencia infinita la Torá de Eretz Israel (la Tierra de Israel). Los talmidei jajamim (eruditos del estudio de la Torá) son llamados “constructores”. Él edificó a Eretz Israel en su aspecto espiritual, fue un fiel emisario del Rav Kuk y de nuestro Rav, el Rav Tzvi Iehudá Kuk.
Nuestro corazón se lamenta por ti, nuestro amigo, compañero, maestro, nuestro Rav. Queda mucho por construir, por enseñar, y mucho más podrías haber construido y enseñado – pero el Sefer Torá (rollos de la Torá) fue guardado...
Pero él también se ha quedado con nosotros aquí. Porque toda su vida, el Rav Beni enseñó. Estudió y enseñó. Enseñó a todos, grandes y pequeños, fue educador en Majón Meir y en la Ieshiva LeTzeirim (liceo religioso), hablantes de hebreo y hablantes de inglés, alumnos de ieshivot (centros de estudio de la Torá) y estudiantes de Mejinot Kdam Tzvaiot (marcos de estudio pre-militares).
Pero él no habló repitiendo lo que escuchó de otros o leyó de otros, sino que de su interior, en base a su autenticidad, en base a la verdad Divina que moraba dentro de él, en su corazón, en su pensamiento, en todo su ser.
Se puede poner un Sefer Torá al lado de él y decir: Este estudió todo lo que está escrito en este otro, enseñó todo lo que está escrito en este otro, cumplió todo lo que está escrito en este otro. Cumplió sus mitzvot, cumplió sus rezos con concentración, cumplió con sus buenas virtudes, cumplió con su seriedad y alegría, cumplió con todo su corazón y con todo su ser.
Su deseo para el nuevo año fue: “Para todos nuestros amigos, en Israel y en el exterior, que sea la voluntad de nuestro Padre en el cielo que este año que llega para bien, para todos, sea un año de salud, de elevación, de pureza, de kdushá (santidad), de vigorización del vínculo entre el pueblo kadosh y toda la tierra kdoshá, a través de nuestro regreso a toda la Torá. Y se cumplirán en nosotros los versículos que fueron dichos por el profeta Ishayau: “Por Tzion no guardaré silencio, y por Ierushalaim no descansaré, hasta que surja como resplandor su salvación y su prosperidad como antorcha ardiente, y verán los pueblos tu justicia, y todos los reyes tu gloria” (Ishaya 62:1-2). Nos encontraremos todos pronto en la plena Ierushalaim, en la gueulá (Redención) plena, pronto, en nuestros días”.

http://www.youtube.com/watch?v=K0h1dbOAMI8
Que su alma quede atada en un mismo haz de vida con el Eterno, junto con todos los tzadikim (justos). 

Departamento ibero-americano

Majón Meir abrió sus puertas para alumnos ibero-americanos de habla hispana y portugués, y te invita a tener esta experiencia única de estudiar Torá en su ambiente tan especial en la ciudad de Ierushalaim.
El programa - dirigido por el Rav Rafael Spangenthal - está destinado para jóvenes de diecisiete años en adelante que desean reforzar su identidad judía por medio del estudio de la Torá en un marco agradable, que enfatiza el valor de nuestros lazos con el pueblo, la Torá y la Tierra de Israel.
Para aquellos que lo deseen, existe también en el Majón un ulpán de hebreo bajo la órbita del Ministerio de Educación.
Para más información los invitamos a llamarnos o escribirnos:
Director del Departamento ibero-americano
Rav Rafael Spangenthal
Tel.: 972-8-9285216
Cel: 972-52-4501467
E-mail:
machon.espanol@gmail.com, editorial@alumbrar.org

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