Beahavá   Ubeemuná

Majón Meir
El centro de estudios judaicos en Israel
Avenida HaMeiri 2, Kiriat Moshe, Ierushalaim  91340

Teléfono: 972-2-6511906         fax: 972-2-6514820
Hebreo: www.machonmeir.org.il
              
torah@machonmeir.org.il 
Español: www.alumbrar.org
               
sfaradit@emeir.org.il


Parashat Vaieji     16 de Tevet 5770     No 749

Nuestro patriarca Iaacov no murió
Rav Ioram Eliahu

La Gmará (Taanit 5B) nos cuenta algo fantástico, citando a Rabí Iojanan: “Nuestro patriarca Iaacov no murió”. Y enseguida, preguntamos todos: Entonces, ¿por qué cuentan los versículos su funeral, que fue momificado y enterrado? Contesta Rabí Itzjak: “Por tanto, no temas, oh Mi siervo Iaacov, dice el Eterno, ni desmayéis, oh Israel, pues he aquí que te salvaré desde lejos, y a tu simiente de la tierra de su cautivo” (Irmya 30:10). El versículo compara a Iaacov con su descendencia: De la misma forma que su descendencia aún vive, también Iaacov.
El Mahara”l explica (Derej Jaim, Pág. 225) que de momento que Iaacov es el último patriarca, es también el resumen de ellos: “Y de él hereda Israel su meta y fin… Iaacov la mayoría de sus días estaba en pena, porque fue perseguido. Pero al final pudo descansar de sus penas, y en ese aspecto es semejante a Israel”. Y pregunta el Mahara”l: ¿Quizás hubiese sido más adecuado que el bien del que disfrutó Iaacov fuese más duradero, porque insinúa la meta final de Israel, y ella es eterna? Y contesta: Por ello “dijeron nuestros sabios que nuestro patriarca Iaacov no murió, y de ello entendemos que se encuentra en el bien eterno, del que no se aparta nunca, y eso insinúa el bien del que será merecedor Israel, que es un pueblo eterno”. Nuestros sabios quisieron expresar de esa forma la eternidad de
Am Israel  (el Pueblo de Israel): A pesar que sufre muchas penurias, su meta final es eterna, sin cambios – como fue dicho en semejanza a Iaacov, que no murió.
Y así lo explicó nuestro Rav, el Rav Tzvi Iehudá Kuk zt”l: “Nuestro patriarca Iaacov es genérico, de todo
Am Israel. Es una personalidad especial, una criatura singular, una realidad sin par, que se identifica plenamente con su descendencia. Por ello, si su descendencia está en vida, también él está en vida – Iaacov y su descendencia son una misma identidad.
El patriarquismo de los patriarcas se revela en este caso de una forma tal que el patriarca y sus hijos son una misma cosa. En nuestro patriarca Iaacov ya comienza
Am Israel, las tribus de Israel. Nuestro patriarca Avraham fue como nuestra semilla, pero con nuestro patriarca Iaacov ya se revela la familia de Iaacov, la Casa de Iaacov – ese es el nivel especial de su patriarquismo: Es una personalidad singular, se trata del principio de Clal Israel (la totalidad genérica de Am Israel)” (Sijot HaRav Tzvi Iehudá, Bereshit 259). “Con Iaacov – el último patriarca – surge la aclaración de qué es Clal Israel. Desde ese entonces y para todas las generaciones somos Iaacov, somos Israel – de forma tal que el Eterno de Israel tiene su expresión en nuestro patriarca Iaacov” (Sijot HaRav Tzvi Iehudá, Bereshit 233).
Según ello, explicó mi maestro y Rav, el Rav Uzi Kaljaim zt”l, otra cita de nuestros sabios (Sota 13). La Gmará
cuenta respecto a lo que aconteció en nuestra Parashá, cuando los hijos de Iaacov vienen a enterrarlo en Eretz Israel (la Tierra de Israel), “y llegaron hasta el granero de los espinos” (Bereshit 50:10). Pregunta la Gmará: ¿Acaso hay un granero de espinos? No. “Dijo Rabí Abau, nos enseña que rodearon el ataúd de Iaacov con coronas, como rodean al granero con espinas. Porque llegaron los hijos de Esav, y los hijos de Ishmael y los hijos de Ktura. Todos llegaron para luchar, pero cuando vieron la corona de Iosef colgada del ataúd de Iaacov, tomaron sus coronas y también las colgaron”. Y continúa contando la Gmará: “36 coronas colgaron del ataúd de Iaacov”. El autor del libro “Tora Temima” explica la cuenta: La corona de Iosef, las 12 coronas de los 12 presidentes de Ishmael, y otras 23 coronas de los 23 generales de Esav. Y explicó el Rav Uzi Kaljaim zt”l qué es lo que simbolizan esas 36 coronas: Quizás está insinuando que Iaacov era semejante a los 36 tzadikim (justos) por el merito de los cuales el mundo existe, e Iaacov fue quien apuntaló al mundo. Otra explicación, es que 36 es la Guimatria (cómputo numérico basado en el valor de cada letra del alfabeto hebreo) de dos veces “Jai” (vivo, en hebreo): Según la Gmará que Iaacov no murió, vivió en su “vida”, y también después de su “muerte”. Vive doblemente.
Todo eso nos enseña cuál debe ser nuestra convicción de la eternidad de Am Israel, nuestra confianza en el Eterno de Israel – que no mentirá ni mudará de propósito. Iaacov vivió muchas complicaciones y desgracias - muchas complicaciones y guerras pasó y pasa nuestro pueblo, pero “nuestro patriarca Iaacov no murió”. Esa frase expresa la eternidad de Am Israel, también dentro de todas las desgracias y complicaciones. Y como nos enseñó el Rav Kuk en su libro “Orot”, que cuando surge una guerra es porque estamos avanzando hacia nuestra meta en el mundo: “Despierta la fuerza del Meshiaj (Mesías), llega el momento del canto del Zamir (ruiseñor, en hebreo), zamir (podar, en hebreo) de tiranos, los malvados son exterminados del mundo y el mundo se endulza, y el canto del ruiseñor se escucha en nuestra tierra… debemos recibir el contenido elevado del resplandor de D’s que se revela sobre todo en esas guerras. ‘Emprende batallas, siembra la justicia y hace brotar la redención. Cura nuestras enfermedades, por eso Él es venerado. Hacedor de maravillas, con Su bondad renueva día a día Su obra de Creación... Irradiará una nueva luz sobre Tzion, y seremos todos merecedores pronto de su resplandor' (Brajot Kriat Shma de Shabat)” (Orot, Pág. 13). 

Midreshet Majón Orá

Centro de estudios de Torá para chicas en
español y portugués
Están todas invitadas!!
Para mas detalles llamar al : 052-4621830
o escribir a: anachman2@walla.com , editorial@alumbrar.org
Para las interesadas, hay dormitorios en el lugar 

El Principito
Rav Shlomó Aviner

Pregunta: Escuché que el libro "El Principito" está lleno de conceptos cristianos, y no se debe leer.
Respuesta: No. Tiene un contenido moral genérico humano. Ese libro es leído en todo el mundo, fue traducido a 180 idiomas y dialectos, y fue clasificado en cuarto lugar en la lista de los mejores libros que fueron escritos en el mundo en los últimos 100 años.
Su éxito se debe a que fue escrito en un estilo ameno y sencillo que es adecuado para niños - pero su contenido es profundo, expresado a través de símbolos, para adultos.

Es más, hace desear al adulto a volver al niño que se encuentra en él, y no perder la candidez de la infancia. Se critica la falta de lógica con la que se comportan los adultos, que olvidan las verdades más sencillas: "[Los mayores] son así. No hay por qué guardarles rencor. Los niños deben ser muy indulgentes con las personas mayores. Pero nosotros, que sabemos comprender la vida, nos burlamos tranquilamente de los números".
El Principito se pasea por el universo, buscando una persona con valor auténtico. Pero sólo encuentra personas grotescas, encerradas en su soledad: El rey – que reina sobre un reinado imaginario, ordenando hacer lo que de todas formas hacen, y su actitud para con el principito es como si fuese su vasallo. El vanidoso, que se piensa que el principito es su admirador, y su aspiración es que todos lo admiren - pero vive sólo en su planeta. El bebedor, que se avergüenza de su vicio, y continúa bebiendo para olvidar su vergüenza – encerrado en un círculo vicioso. El hombre de negocios, que todo el tiempo cuenta las estrellas que se piensa que le pertenecen, y planea utilizarlas para adquirir más estrellas. El farolero, que está trancado en su mundo con un comportamiento automático, sin sentido. Su papel era encender el farol al principio de la noche y apagarlo cuando llegase el día, pero su planeta gira más y más rápido, de forma que él enciende y apaga su farol todo el tiempo sin descanso - y no le queda ni un poco de tiempo para sí mismo. El geógrafo, que escribe gruesos libros de mapas, pero nunca se encontró con nada, salvo consigo mismo. Cuando se dispone a tomar nota del mundo del Principito, este le cuenta que en su planeta hay una flor hermosa. Pero el geógrafo le explica que de las flores no se toma nota. El Principito se sorprende, ya que este se ocupa sólo de la cáscara superficial de la vida, y se pierde las cosas más importantes como la flor – que insinúa la añoranza por su esposa.
El principito busca un mundo con sentido, pero encuentra mundos vacíos. Sobre todo es muy aterradora la descripción de los tres árboles baobab gigantes que aferran al pequeño planeta con sus raíces, y casi lo hacen explotar. Todo eso pasó porque la semilla del baobab es parecida a la de las rosas, y por eso al principio no le prestaron atención, no se dieron cuenta del peligro que se esconde en ellas y no las arrancaron. La intención del autor es que hay todo tipo de fuerzas del mal que parecen ser agradables al principio, pero si no se está atento y no se las arranca de cuajo, se transforman en verdaderos monstruos. Está insinuando al Nazismo y al Fascismo, que en el principio parecían ser agradables, como una rosa. La descripción de los árboles baobab es muy aterradora, como una advertencia de urgencia. Por supuesto, es lo mismo tratándose de todo tipo de semillas malas en toda generación, en todo pueblo y en toda sociedad.
El principito se ocupa de arrancar las raíces de baobab todo el tiempo, que intentan fortalecerse en su planeta, y el deshollinado de sus tres volcanes apagados – porque también los volcanes apagados hay que cuidarlos.
Aprendemos de ello que la invitación del autor de volver a encontrar el niño que se encuentra dentro nuestro, porque "todos los mayores han sido primero niños, pero pocos lo recuerdan" – no es sólo un entretenimiento, sino que una tarea muy seria y responsable, que se encuentra dentro de la infancia pura.
Lo tercero que hay en el planeta del principito es la flor – la pareja ideal que él anhela. Pero también en este caso le esperan defraudaciones: La rosa es muy bella, pero tiene espinas. Es orgullosa, coqueta y exigente. Es más, buscando una amistad sincera, llega a un jardín de rosas, y descubre que su flor no es la única, y se siente muy desgraciado. Entonces, se encuentra con el zorro - que al principio parece muy extraño, pero es él el que le enseña qué es una amistad profunda, cómo se logra un vínculo auténtico, lo que apoda "domesticar": "Eres responsable para siempre de lo que has domesticado", "lo que hace más importante a tu rosa, es el tiempo que tú has perdido con ella", "sólo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible para los ojos".
Después de muchas búsquedas, el principito se dispone a ver la puesta del sol, pero su planeta es tan pequeño que alcanza con mover unos metros la silla para poder verla: No se necesita ir lejos para poder ser merecedor de la felicidad. Ella está aquí.

Departamento ibero-americano

Majón Meir abrió sus puertas para alumnos ibero-americanos de habla hispana y portugués, y te invita a tener esta experiencia única de estudiar Torá en su ambiente tan especial en la ciudad de Ierushalaim.
El programa - dirigido por el Rav Rafael Spangenthal - está destinado para jóvenes de diecisiete años en adelante que desean reforzar su identidad judía por medio del estudio de la Torá en un marco agradable, que enfatiza el valor de nuestros lazos con el pueblo, la Torá y la Tierra de Israel.
Para aquellos que lo deseen, existe también en el Majón un ulpán de hebreo bajo la órbita del Ministerio de Educación.
Para más información los invitamos a llamarnos o escribirnos:
Director del Departamento ibero-americano
Rav Rafael Spangenthal
Tel.: 972-8-9285216
Cel: 972-52-4501467
E-mail:
sfaradit@emeir.org.il, editorial@alumbrar.org

Es posible leer la publicación de esta semana y las anteriores en www.alumbrar.org. Para recibirla directamente a su casilla de correo electrónico, escríbanos a suscribame@alumbrar.org