Alumbrar

basado en materiales de Majón Meir

Parashat Tetzave     13 de Adar 5767     Shabat Zajor     No 606

Para las generaciones futuras
Rav Iaacov Filver

Cuando Ester le pidió a los sabios “escríbanme para las generaciones futuras” (Meguila 6A), ellos le contestaron: “Tú harás que los demas pueblos nos envidien!”. A primera vista, esa respuesta es extraña: Acaso a alguien se le ocurre censurar nuestras escrituras sagradas, sólo por lo que pueden llegar a decir los gentiles?. Es más: El Ramba”m escribe en su carta, “Igueret Teiman” que “por habernos distinguido El Creador con Sus mitzvot y Sus leyes, y haber sido aclarada nuestra grandeza frente a los demás con Sus pautas y Sus estatutos - como dice el versículo ‘y qué nación es tan grande, que tenga estatutos y leyes tan justos…?’ (Dvarim 4:8) - nos envidiaron todos los idólatras” – acaso por esa envidia a alguien se le ocurrirá borrar o esconder la grandeza espiritual de Am Israel (el Pueblo de Israel), para no hacer despertar el odio entre los pueblos?!. Entonces, cuál era la discusión entre Ester y los sabios?.
La respuesta de los sabios podremos entenderla tomando en cuenta la situación de aquel entonces: En su época, todavía no habían sido selladas las escrituras sagradas, y Ester pidió que también su Meguilá (libro) sea incluida junto con los demás libros del Tanaj (La Biblia). Los sabios tenían un criterio determinado para decidir qué libro incluir entre las escrituras sagradas y cuál no: “Muchos profetas tuvo Am Israel, dos veces tanto como la cantidad de personas que salieron de Egipto. Pero sólo las profecías que son necesarias para las generaciones futuras fueron escritas en el Tanaj” (Meguila 14A). Esa era la discusión entre Ester y los sabios: Acaso lo que está escrito en “Meguilat Ester” es necesario para las generaciones futuras?.
Según los sabios (y la sabiduría de una persona es fruto de su experiencia) el relato de la Meguilá no es necesario para las generaciones futuras: Hasta que llegó Aman, no hubo un antecedente histórico de un intento de exterminio de todo el Pueblo Judío, de un genocidio. Por ello, el episodio de la Meguilá es único, es inconcebible que pueda volver a repetirse. Es cierto que a lo largo de la historia judía Am Israel conoció desgracias y agresiones: Como Esav y Lavan, como Paró (El Faraón) en Egipto – que decretó “todo varón que nazca, lo tiraréis al río” (Shmot 1:22) - y más tarde Amalek en el desierto, y los demás pueblos que nos odiaron en la época de los Shoftim
(Jueces) y los reyes. Pero un decreto “demente” como “destruir, matar y exterminar a todos los judíos, mozos y viejos, niños y mujeres en un mismo día” (Ester 3:13), un peligro de ese tipo no conoció el pueblo hasta la época de Mordejai y Ester. Y para ellos, en base a la experiencia histórica, el intento de aniquilar a todo el pueblo es un episodio extraordinario y único, que no se repetirá en el futuro. Por ello, no querían introducir en el Tanaj un episodio fugaz de ese tipo, que no es una profecía que sea necesaria para las generaciones futuras.
Pero Ester – que fue una de las siete profetizas de Am Israel, y la profecía no es fruto de la experiencia del pasado sino que es un punto de vista más allá de las limitaciones del tiempo y el espacio – vio el futuro del Pueblo Judío. Con su inspiración Divina, supo que el episodio de la Meguilá lamentablemente no será extraordinario, sino que volverá a ocurrir algo así muchas veces en la historia futura. Armada de la profecía, Ester sabía que al Pueblo Judío le espera una larga galut (exilio) en el Desierto de los Pueblos, cuyo término no se ve en el horizonte. Una galut en la que en los momentos difíciles el pueblo se sentirá como el que se ahoga en alta mar, en profundas aguas sin fondo, y necesita de algún tablón que lo ayude a flotar y no se sumerja – incluso si no sabe a donde lo llevarán las corrientes de las desgracias. Ese tablón – en opinión de Ester – es “Meguilat Ester”: Ella le enseña a Am Israel que incluso si el pueblo llegará en la galut a una situación en la que pretenderán “destruir, matar y exterminar”, en una situación de Holocausto, incluso si no se verá ni un pequeño rayo de luz en la punta del oscuro túnel de la galut, no hay que desesperar, porque el mal decreto puede ser mutado – a veces en una sola noche!. El principal mensaje de la Meguilá, es “sucedió todo lo contrario” (Ester 9:1): No hay ninguna otra profecía que sea tan necesaria para las generaciones futuras como lo que está escrito en ella. Y finalmente, los sabios coincidieron con Ester, y “Meguilat Ester” fue escrita para todas las generaciones en el Tanaj.

Midreshet Majón Orá

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Ester
Rav Shlomó Aviner

El ayuno lleva el nombre de Ester, y también la Meguilá (libro) es llamada “Meguilat Ester”. Las mujeres deben escuchar la lectura de la Meguilá – porque también ellas fueron parte del milagro. Los Rishonim lo explican de dos formas distintas: 1. Ellas también estaban incluídas en el decreto de exterminio. 2. El milagro llegó justamente a través de una mujer.
Se encontraban en una situación terrible: Fue decretado
“destruir, matar y exterminar a todos los judíos, mozos y viejos, niños y mujeres en un mismo día” (Ester 3:13). A primera vista, una tragedia de la que no hay salvación. Y la salvación llegó gracias a una mujer tzadika (justa) y tímida – pero sabia y decidida. Ella era una persona callada, descendiente de personas calladas, que esa era su característica: Descendiente de Shaul – que se esconde entre los pertrechos (Shmuel Alef 10:22), que  “del asunto del reino no dijo nada” (Shmuel Alef 10:16) . Descendiente de Binyamin – que no contó de la venta de Iosef. Y descendiente de Rajel – que calló y le dio las señales a su hermana, para que Iaacov piense que ella es Rajel. Qué sublime fue la renuncia de Rajel – que se escondía en la sombra, y volvió a estar en la sombra!. El primer encuentro con Iaacov fue acompañado del llanto – porque en la relación de Iaacov y Rajel hay algo frágil y pasajero. Nuestros sabios dicen que Iaacov vio con su inspiración Divina que ella no será enterrada con él. Ya desde el principio Rajel sintió lo que sucederá al final, cuando será desplazada. Y por ello dijo: “Dame hijos, de lo contrario me muero” (Bereshit 30:1) – y en el midrash nos cuentan que vio que morirá pronto, y quería dar a luz antes de ello.
Ester fue una reina pasajera – como Iosef. A primera vista, es una reina majestuosa – pero en realidad, ella sacrificó su vida, a pesar de que su posición le estaba asegurada: “Y si perezco, que perezca” (Ester 4:16), ella “hacía lo que Mordejai le había mandado” (Ester 2:20), poniendo en peligro su vida. Puso en peligro su cuerpo y también su alma – cuando tuvo que sumergirse en la inmundicia del rey Ajashverosh, dirigiéndose a él por su propia iniciativa. Toda su vida estuvo presa en ese palacio, lleno de idolatría, adulterio y asesinato.
Pero también allí ella permaneció en su kdushá (santidad) y con su inspiración Divina – semejante a Clal Israel (la totalidad genérica del Pueblo de Israel), que también si pecamos y nos adormecimos en el cumplimiento de las mitzvot, nos queda aún nuestra elevada esencia espiritual interna, “toda tú eres hermosa, mi compañera, y no hay en ti defecto alguno” (Shir HaShirim 4:7), “virgen, y no había conocido varón” (Bereshit 24:16). Ester, la huérfana, que se encuentra apresada por las klipot [Concepto esotérico, que simboliza la impureza que rodea a la esencia pura. N. del T.] – pero que permaneció en su elevada pureza, semejante a la Shjina (la manifestación de la Presencia Divina) en la galut (exilio). Y el principal milagro – fue a través de ella.

El movimiento de enlace
Rav Shlomó Aviner

Ese es nuestro movimiento, el movimiento de enlace, un movimiento antiguo y nuevo. Cuantas más personas se enrolen en él, tanta más bendición procurará y será capaz de hacer una revolución.
El movimiento de enlace marcha por la carretera que elude los medios de prensa, la política, las manifestaciones, las protestas hirientes, las expresiones amenazantes, como "si-me-será-malo-también-lo-será-para-ti”, elude el "contra". Porque conectarse es estar "a favor", a favor de la unión de la nación por encima de todo. Conectarse es estar en contra de "vencedores y vencidos", pero es estar a favor de que todos seamos vencedores y nadie sea vencido, estar a favor de ir de casa en casa, de corazón en corazón. En nuestro movimiento, acostumbramos a decir que estamos muy contentos de estar juntos en nuestra tierra, estamos contentos que tenemos un país y un ejército. Estamos contentos de lo que tenemos, y de esa forma también aspiramos a mucho más: Que el trabajo sea respetado, y no sea entregado a extranjeros. Que se anhele poseer nuestra tierra, y no se entregue parte de ella a extraños. Que sea un honor ser soldado, y ser un soldado en una unidad combatiente más aún. Aspiramos a una buena educación, con el corazón, con fe, con buenas virtudes. Que las resoluciones de los jurados sean naturales, correctas y auténticas. Que la juventud sea derecha y buena, sin violencia, alcohol, prostitución ni drogas. Que haya seguridad en nuestra tierra, sin rendirse al terrorismo. Que la televisión sea limpia y el arte delicado. Que las familias sean felices, sin mujeres maltratadas o humilladas, matrimonios según la halajá, recatados y fieles. Familias numerosas. Respeto por el shabat, y no entretenimiento, compras y esclavización de los empleados. Una política de asistencia social amplia, gracias a la que la opresión económica de nuestros hermanos desaparezca.
Tantos anhelos!. Cómo lo lograremos?!. Para ello conversaremos, nos uniremos, lejos de los proyectores de la prensa.
Esa es la regla, "busco a mis hermanos". Nos encontraremos no para obtener algo, sino que para encontrarnos, porque somos hermanos, y de esa forma lograremos alcanzarlo todo.

Departamento ibero-americano

Majón Meir abrió sus puertas para alumnos ibero-americanos de habla hispana y portugués, y te invita a tener esta experiencia única de estudiar Torá en su ambiente tan especial en la ciudad de Ierushalaim.
El programa - dirigido por el Rav Rafael Spangenthal - está destinado para jóvenes de diecisiete años en adelante que desean reforzar su identidad judía por medio del estudio de la Torá en un marco agradable, que enfatiza el valor de nuestros lazos con el pueblo, la Torá y la Tierra de Israel.
Para aquellos que lo deseen, existe también en el Majón un ulpán de hebreo bajo la órbita del Ministerio de Educación.
Para más información los invitamos a llamarnos o escribirnos:
Director del Departamento ibero-americano
Rav Rafael Spangenthal
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