Edición semanal
Basada en materiales de Majón Meir

Anterior | Posterior | Archivo | Imprimir | Página inicial


Iom Kipur     10 de Tishrei 5774     No 935


Rav Elishá Aviner

"Hasta que se reconcilien"
Rav Elishá Aviner
(reimpresión)

En el marco de las halajot de Iom Kipur (Día del Perdón) en el Shuljan Aruj (el libro de halajá por excelencia), se encuentran dos incisos que hablan en relación a la Tshuva (arrepentimiento sincero): El inciso 606 cuyo título es "se debe reconciliar con el prójimo en vísperas de Iom Kipur", y el inciso 607 cuyo título es "cómo se deben confesar los pecados en el rezo, en vísperas de Iom Kipur". ¿Por qué fueron elegidos sólo esos dos incisos, de entre las numerosas halajot relativas a la Tshuva? La mitzva de la Tshuva debe ser cumplida todo el año: Todo el que pecó, debe arrepentirse sinceramente de inmediato. Pero en el Shuljan Aruj fueron enumeradas sólo las halajot pertinentes a vísperas de Iom Kipur.
La primer
halajá dice que la persona debe reconciliarse con su prójimo en vísperas de Iom Kipur. Por ello los sabios de Am Israel (el Pueblo de Israel) acostumbraban facilitarle a las personas que debían pedirles perdón y reconciliarse con ellos, provocando encuentros "fortuitos" (Ioma 87A). ¿Pero qué relación hay entre la reconciliación y Iom Kipur? La respuesta figura en la Mishná: "Los pecados que cometió la persona para con su prójimo, Iom Kipur no expía, hasta que se reconcilie". Así interpretó Rabí Elazar Ben Azaria el versículo "de todos vuestros pecados, frente a D's os purificarás" (Vaikra 16:30): En Iom Kipur nos purificamos sólo de los pecados que fueron cometidos "frente a D's" - los pecados para con D's - pero no nos purificamos de los pecados que fueron cometidos para con el prójimo.
Pero entonces, todavía se debe preguntar: ¡
¿Acaso la obligación de reconciliarse con el prójimo es sólo en vísperas de Iom Kipur?! Si alguien ofendió a su prójimo, debe reconciliarse con él en todo momento, como dice la Mishná (Baba Kama 92A): ¡El que dañó a su prójimo de alguna forma, no alcanza con indemnizarlo para que le sea perdonado su pecado, sino que también debe pedirle perdón!
Explicó el Rav Solovietchik que en toda ocasión que una persona desea arrepentirse sinceramente debe pedirle perdón a su prójimo, hasta que él lo perdone. Pero en vísperas de Iom Kipur hay otra exigencia: Deben reconciliarse. La relación entre ellos debe volver a ser una relación de amor y hermandad, como antes. En forma similar comentó el Sfat Emet (Iom HaKipurim 5651): "Hasta que se reconcilie con su prójimo - es decir, hasta que vuelva a amar a su prójimo". No sólo un perdón formal, sino que sus almas deben volver a unirse.
¿
Y por qué en vísperas de Iom Kipur no alcanza con un perdón común, y se exige una reconciliación de amor? Explicó el Rav Solovietchik que la expiación de Iom Kipur es una expiación genérica: Ella se obtiene a través del cabrío que es enviado al desierto, que es considerado como una oblación de Clal Israel (la totalidad genérica del Pueblo de Israel). El individuo particular expía sus pecados sólo a través del Clal. Para ligar y unificar a todo el Clal, hay que borrar todos los obstáculos y diferencias que separan entre los individuos particulares que componen el público. Esa es la reconciliación de vísperas de Iom Kipur, cuya meta es fortalecer la unión entre todas las partes que componen la nación.
En forma semejante escribe el
Sfat Emet (allí) que en Iom Kipur "todo Am Israel se transforma en una unidad... y se unen todas las almas". Y continúa explicando que en realidad todas las almas de Am Israel están muy cercanas, y sólo por los pecados se distancian. Según eso, se puede entender el versículo (Ishaya 59:2): "Vuestras iniquidades separan entre vosotros y vuestro D's", que los pecados separan entre ustedes - es decir, entre uno y otro - y también entre ustedes y D's. Él agrega que se deben corregir ambos distanciamientos, y por ello en vísperas de Iom Kipur se debe reconciliar con su prójimo.
El Meshej Jojma (Vaikra 8:7) dice que es por ello que se acostumbra a obsequiar más limosna durante los "Diez Días de Arrepentimiento" (desde Rosh HaShaná hasta Iom Kipur), como escribe el Ramba"m. La limosna es una preparación para la purificación de Iom Kipur - una purificación genérica - y por ello depende del vínculo de la persona particular al Clal. Y así dice él: "(el objetivo de la limosna) es para que nos vinculemos con toda la generalidad de nuestros hermanos, la Casa de Israel... el que se encuentra unido a Clal Israel se purifica de su impureza dentro de la generalidad de todo  Am Israel su pueblo, que siempre se encuentra vinculado con D's".
Esa idea es expresada en forma esquemática en el proverbio del Rav Kuk para el mes de Tishrei: "El alma del individuo particular se purifica en el origen, en Am Israel. Y el alma de toda la nación - en D's, que es el que purifica a todo Israel, Creador de todos los mundos". La pureza del individuo particular se alcanza a través de la pureza de toda la nación. Por ello, es muy lógico que el individuo particular se esfuerce por reforzar su vínculo con toda la nación en vísperas de Iom Kipur. Hay quienes dicen que esa es la razón por la que se acostumbra también a invalidar los juramentos y promesas en esa ocasión y por ello convirtieron a Kol Nidrei (rezo en el que se invalidan las promesas y juramentos) en la oración que comienza el oficio de ese día. Un juramento es una acción particular que una persona se comprometió a hacer. El culto a D's particular es recomendable durante todo el año, pero cuando nos acercamos a Iom Kipur la persona debe eliminar todos los obstáculos que lo separan de la generalidad de la nación, anular sus ataduras particulares. Esa es la anulación de las promesas y juramentos.
Le desearemos a todos un año de reconciliación, un año de amor y unión, un año de vinculación con la nación, y un año de expiación para todo
Clal Israel. ¡Amén!

Midreshet Majón Orá

Centro de estudios de Torá para chicas en
español y portugués.
¡¡Están todas invitadas!!
Para más detalles llamar al 052-4621830
o escribir a anachman2@walla.com, editorial@alumbrar.org
Para las interesadas, hay dormitorios en el lugar.


Rav Shlomó Aviner

El secreto de la concentración
Rav Shlomó Aviner

Pregunta: ¿Cómo se puede aumentar la concentración en el rezo, en el estudio y en la vida en general?
Respuesta: Como en todo ese tipo de temas, hay dos direcciones que deben ser conjugadas; tierra y aire.
Aire: Entender en gran altura. Tierra: Acostumbrarse en el nivel más bajo.

Aire – entender:
Entender es el gran ideal, como es explicado en el libro de Musar (cultivo de las virtudes) Musar Avija” (del Rav Kuk, capítulo “bekol drajeja daeu”). Toda cosa buena que hace la persona, allí se encuentra D’s. Por lo tanto, debe hacerlo con gran sacrificio.
Hay dos interpretaciones al versículo “en todos tus caminos, tenLo presente” (Mishlei 3:6). La interpretación amplia: Se puede encontrar a D’s en todo. La interpretación limitada: Toda buena obra que hace la persona, allí se encuentra D’s en ese momento, y no en otro lado. Cuando la persona reza, D’s se encuentra en el rezo. Él no lo encontrará en el estudio o en alguna obra de caridad. Cuando la persona estudia, D’s se encuentra en su estudio. Él no lo encontrará en el rezo o en alguna obra de caridad. Cuando la persona hace alguna obra de caridad, D’s se encuentra en esa obra. No es el momento de rezar o estudiar. Como dice la gmará, que a pesar que el estudio de la Torá es más elevado que el rezo, en el momento del rezo se debe rezar y no estudiar. “El momento del estudio, y el momento del rezo por separado” (Shabat 10).
¿Cuál es la fuente del Rav Kuk? El secreto de la limitación. D’s, a pesar que está por encima de todos los mundos y existía antes que todos los mundos, cuando hace algo, es como si se limitase a sí mismo en eso. Cuando D’s le habla a nuestro patriarca Avraham, no hace otra cosa al mismo tiempo. Por supuesto, todo eso desde nuestro punto de vista. Así también la persona debe limitarse a sí misma - en contraste con la nueva moda de dispersión, que alaba al que hace mil cosas a un mismo tiempo, semejante a una mariposa que en cada momento salta de una flor a otra. Esa es una nueva moda, de los últimos 500 años, como reacción a la exagerada presión cristiana y la terrible coerción. Comprendemos la reacción, pero no hay que exagerar en el otro extremo. La persona debe decidir qué hacer, y hacerlo bien. Por supuesto que la persona puede cambiar de parecer, pero no como ideal.
Por ello, hay que entender la grandeza del concentrado. No se debe bailar en todos los casamientos, saber todo lo sabido y trabajar en todas las profesiones. Lo que haces, lo debes hacer focalizado, concentrado y bien. Si eres un médico, debes ser un médico excelente. Si estudias Torá, debes estudiarla excelentemente.
Hay un cuento de una persona que se encontró con un amigo y lo invitó a comer.
- ¿Qué tal el tío Eliahu?
- Murió.
- ¿Entonces, la tía Sara está sola?
- Ella murió.
- ¿Ella también murió? ¡Qué desgracia!
Ya no tenía apetito, y no podía comer. Luego, preguntó:
- ¿Qué haces en tu vida?
- Trabajo en la carpintería del tío Eliahu.
- ¡¿Pero has dicho que murió?!
- Cuando yo como, todo se murió.
Deja comer en paz a la persona…
Es necesario comer, entonces, come como es debido. No como mamá, que se ve obligada a comer, amamantar, cocinar, lavar la ropa, perseguir al niño que se escapó, bañar al otro niño y contestarle el teléfono a la suegra que le da consejos…
Hay que comprender que el ideal es no hacer varias cosas al mismo tiempo. Lo que hacemos, lo hacemos bien. En el Beit HaMikdash hay leviitas que son porteros, y hay leviitas que son cantadores. El cantador tiene prohibido ayudar al portero. Cantador que cerró los portones, o portero que cantó – se merecen la muerte (Arajin 11B).

Tierra – acostumbrarse.
¿No logras concentrarte en el rezo? Puedes acostumbrarte en forma gradual. Concéntrate en una de las bendiciones de Shmoná Ezre, y cada semana agrega otra bendición más, en forma gradual. Es lo que en el ejército se llama “escala de esfuerzo”: No le ordenan al soldado el primer día cargar 40 kilos en la espalda y correr 40 kilómetros. El primer día, carga un kilo y corre un kilómetro, y se va aumentando gradualmente.
¿Te es difícil concentrarte en el estudio? Gradualmente. ¿No lo logras? Bebe agua, y vuelve al estudio. O estudia otra cosa. Lentamente, te acostumbrarás a concentrarte. Hay muchas personas con problemas de atención que a pesar de ello lograron ser talmidei jajamim (eruditos del estudio de la Torá).
¿Te cuesta concentrarte en la vida? Lo mismo, todo gradualmente. De a poco, se puede vencerlo todo.
Es cierto respecto a toda la vida. Tú te casas con una muchacha – todas las otras es como si no existiesen. Como le dijo el Primer Hombre a su esposa Java luego de casarse: Todas las otras mujeres son como monos para mí (Zohar).
“¿Pero tengo una amiga del movimiento juvenil?” – ¡Ella no es tu amiga! ¡Ella dejó de existir! Es un mono.
Eso se llama "tierra", acostumbramiento. Por supuesto, para que la persona esté interesada en acostumbrarse, debe comprender. Antes que nada necesita un “aire” elevado. Es importante.
En resumen: Todo lo que se hace, se lo hace bien y en forma gradual, y entonces se tiene éxito.
 

Departamento ibero-americano

Majón Meir abrió sus puertas para alumnos ibero-americanos de habla hispana y portugués, y te invita a tener esta experiencia única de estudiar Torá en su ambiente tan especial en la ciudad de Ierushalaim.
El programa - dirigido por el Rav Rafael Spangenthal - está destinado para jóvenes de diecisiete años en adelante que desean reforzar su identidad judía por medio del estudio de la Torá en un marco agradable, que enfatiza el valor de nuestros lazos con el pueblo, la Torá y la Tierra de Israel.
Para aquellos que lo deseen, existe también en el Majón un ulpán de hebreo bajo la órbita del Ministerio de Educación.
Para más información los invitamos a llamarnos o escribirnos:
Director del Departamento ibero-americano
Rav Rafael Spangenthal
Tel.: 972-8-9285216
Cel: 972-52-4501467
E-mail:
sfaradit@emeir.org.il, editorial@alumbrar.org