Edición semanal
Basada en materiales de Majón Meir

Parashat Lej Leja     8 de Jeshvan 5771     N^o 788

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Maguen Avraham y Maguen David
En la actualidad

Nuestro patriarca Avraham fue elegido por D’s para dirigir al mundo, como lo indica su cambio de nombre “no será llamado más tu nombre Avram, sino que será tu nombre Avraham, porque padre de multitud de naciones te he designado” (Bereshit 17:5). Y como dijeron nuestros sabios “el día que falleció nuestro patriarca Avraham todos los grandes personajes de las naciones del mundo vinieron y dijeron: Pobre del mundo que perdió su director, pobre del  barco cuyo capitán ya no está” (Baba Batra 91A). Y también el Midrash comenta el versículo “entonces salió a su encuentro el rey de Sdom, después de que Avraham volvió de derrotar a Kadarlaomer y a los reyes que estaban con él, en el valle de Shavé, que es el valle del rey” (Bereshit 14:17) que coronaron a Avraham como presidente de D’s y comandante (Rashi). Y en efecto, nuestro patriarca Avraham - que el Ramba”m apoda “el pilar del mundo”, y gracias a cuyo mérito fue creado el mundo (Baal HaTurim, Bereshit 2:4) - es el personaje con mayor influencia en la historia del mundo y del género humano, desde el principio hasta el final.
Fuimos ordenados especialmente estudiar y prestar atención a la personalidad de nuestro patriarca Avraham, como dice el profeta “mirad la roca de donde fuisteis cortados y a la cantera de donde habéis sido sacados, mirad a Avraham vuestro padre y a Sara que os dio a luz” (Ishaya 51:1:2). Si deseamos conocernos a nosotros mismos, debemos conocer primero la cantera de la que fuimos socavados, las raíces de las que hemos nacido. La Torá y nuestros sabios están colmados de descripciones respecto a las acciones de nuestro patriarca Avraham – el que tenía un alma noble y bondadosa, todo él buena mirada para con las criaturas, el gran educador de su pueblo y de toda la humanidad, y también el valiente luchador contra la idolatría y la maldad de su generación y en forma genérica, y él es el gran triunfante – con la ayuda de D’s – como sellamos todos los días en nuestro rezo “bendito seas tú… Maguen Avraham” [maguen es escudo, defensor o guardián en hebreo. N. del T.].
En la actualidad, lo que le ocurrió a los patriarcas insinúa lo que le ocurrirá a los hijos. Todas esas nobles cualidades que se manifestaron en nuestro patriarca Avraham, y todas esas buenas acciones que hizo toda su vida no se desvanecieron. Ellas fueron acuñadas en Am Israel (el Pueblo de Israel), en los “genes” espirituales y prácticos del “pueblo del D’s de Avraham” (Tehilim 47:10). Las promesas y el pacto que D’s determinó con nuestro patriarca Avraham se van cumpliendo frente a nuestros ojos. La promesa “y te haré una gran nación… y serán bendecidas en ti todas las familias de la tierra” (Bereshit 12:2-4) se va plasmando frente a nuestros ojos: Es cierto que no somos grandes en cantidad, pero lo somos en calidad. El Estado de Israel – con toda su pequeñez física – ya hoy en día tiene un lugar central  de influencia mundial en la familia de los pueblos, e irá tomando un papel más central hasta que seamos merecedores de ver la materialización de la profecía “y vendrán muchos pueblos que dirán; venid, subamos a la Montaña del Eterno, a la Casa del D's de Iaacov, Él nos enseñará Sus caminos y andaremos en Sus senderos” (Ishaya 2:3), que es la plasmación del llamado eterno de nuestro patriarca Avraham, “invocó allí el Nombre del Eterno, el D's del universo” (Bereshit 21:33).
También la promesa que Am Israel heredará la tierra - como dice el versículo “en ese día concertó el Eterno con Avram un pacto diciendo; a tu descendencia entrego esta tierra” (Bereshit 15:18) – se va cumpliendo en nuestra generación, la generación de la reunión de los exilios, la generación del renacimiento nacional, cuya cima será cuando seamos merecedores de alumbrar a toda la humanidad, cuando todos los habitantes de la tierra reconozcan y sepan que el D’s de Israel es El Rey, y gobierna sobre todo.
Los dirigentes políticos de EE.UU. y el resto de los países del mundo reconocerán – tarde o temprano – el liderazgo auténtico – espiritual y moral – del género humano, que se expresa en el Pueblo Eterno, el Pueblo del D’s de Avraham, es decir, Am Israel en Eretz Israel (la Tierra de Israel). De la misma forma que en el rezo comenzamos con “Maguen Avraham” y culminamos rogando la llegada del Meshiaj (Mesías), “el hijo de David, Tu siervo, florezca rápidamente y aumente su poder mediante Tu salvación”, así también toda la historia cultural del género humano y de Am Israel está insinuada en esos dos “escudos”, esos dos liderazgos, “Maguen Avraham” y “Maguen David”: Nuestro patriarca Avraham que es la semilla, y el rey David que es como el dulce fruto, del que comerán todos los seres del mundo. Bienaventurados somos, que fuimos merecedores que el escudo de nuestro país es el “Maguen David” (la Estrella de David). Y veremos pronto la plasmación de la visión del profeta: “Porque el Eterno ha consolado a Tzion, ha consolado a todos sus desiertos y los ha hecho como el jardín del Eterno. Regocijo y alegría se hallarán en ellos, alabanza y rumor de cánticos” (Ishaya 51:3).

De quien anhela la salvación plena
Dov Bigun

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El reservista
Rav Shlomó Aviner

Yo te saludo, reservista, en nombre de toda la nación, de todas las generaciones, yo te expreso mi aprecio.
En nombre de nuestros patriarcas, Avraham, Itzjak e Iaacov – que fueron guerreros. En nombre de nuestro Rav Moshé – que fue un guerrero. En nombre de David y sus huestes, en nombre de Bar Kojva y sus soldados – te saludo, y te hago la venia.
En nombre del movimiento juvenil más grande de la nación, el más serio y el más responsable, un movimiento juvenil que está compuesto por un millón de participantes – el Ejercito de Defensa de Israel – que es tan amado, que incluso sus egresados continúan visitándolo – yo te saludo.
Frente a tu sacrificio – ya seas un soldado de combate, ya seas un soldado que apoya el combate – frente a tu valor frente al peligro – yo hago la venia.
Frente a tu sacrificio, cuando dejas a tu esposa y tus hijos por corto o largo tiempo – yo hago la venia. Y en esta ocasión, también a ti, la esposa del reservista – te hago la venia.
Frente a tu sacrificio económico – porque casi siempre el pago por días de servicio de reserva es menos que tu sueldo o tus ganancias – yo hago la venia.
Mi amigo, el reservista, tú sabes que eres un idealista. Seguramente tú te sonrojas cuando lo escuchas – y también por eso te aprecio.
Hay que pararse en señal de respeto frente al que cumple una mitzva, y por ello yo me paro frente a ti. Porque tú cumples la gran mitzva de “no te desentenderás de la sangre de tu prójimo” (Vaikra 19:16) – y por supuesto cuando se trata de peligro de muerte de toda la nación. Porque tú eres un testigo viviente de “todo el que salva una persona de Israel, es como si hubiese salvado todo un mundo” – y por supuesto el que salva a todo un mundo de gente. Ya sea que tengas una kipa sobre tu cabeza o no – yo me paro frente a ti.
Mi querido reservista, tú cumples la gran mitzva de la protección de la tierra, de la liberación de la tierra, como dice el Ramba”n que esta tierra tiene que estar bajo nuestro poder, y esa es una gran mitzva que se cumple con sacrificio, como también la anterior. Ya sea que tengas una kipa visible o una kipa invisible, no sólo que me paro frente a ti, sino que me paro bien derecho.
Porque quiero que sepas, reservista, que ya estoy harto de esperar en la estación del tren, para que después me empujen a carrones de ganado para llevarme a campos de concentración. Porque estoy harto de ser una oveja entre 70 lobos, que arrancan de ella pedazos de carne. Por eso, cuando yo veo que la oveja consiguió un rifle y extermina enemigos – yo te lo agradezco mucho, y me paro en señal de respeto frente a ti.
Porque se debe parar frente al que cumple una mitzva, y la mitzva más grande es la santificación del Nombre de D’s. Y cuando Am Israel (el Pueblo de Israel) es atacado y torturado, asesinado y exterminado – esa es una terrible profanación del Nombre de D’s. Y cuando devuelve los golpes, y golpea con fuerza al enemigo, esa es la más grande santificación del Nombre de D’s. Por eso, ya sea que tengas una kipa de lana sobre la cabeza, o estás cubierto por el tanque – yo te hago la venia.
Porque a veces tú llegas al servicio de reservista y te encuentras con que el equipamiento no está en buenas condiciones, también falta equipamiento de primeros auxilios, y hay mucha confusión – y tú lo aceptas todo sin protestar, con una sonrisa y buen humor.
Escucha, reservista: Tú eres una criatura maravillosa, una persona poco corriente. Yo te expreso mi aprecio.
Porque a veces te duele en el corazón que no todos cumplen con su obligación. Si, te duele y te sientes un tonto – y a pesar de ello, llegas al servicio de reservista, sientes que tú cumples con una misión, sientes orgullo – y por ello, te hago la venia.
Porque también después de la edad que estás exento, tú llegas en forma voluntaria. Y también cuando tenías la obligación podrías haberte escabullido – en realidad, siempre fuiste voluntario, y yo te hago la venia.
Porque gracias a ti el pueblo que habita en Tzion puede vivir su vida con tranquilidad, porque tú eres una muralla humana de protección, porque tú cumples en tu vida “todo el pueblo ejército, todo el país frente de batalla”, porque eres un soldado excelente y una persona excelente, llena de valor, llena de alegría, llena de fraternidad de compañeros de armas, llena de amistad para con tus amigos.
En nombre de toda la nación – yo te hago la venia.