Edición semanal
Basada en materiales de Majón Meir

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Parashat Ree     30 de Av 5782     Rosh Jodesh     1373 


“Hijos sois del Eterno”
Rav Jananel Etrog
(reimpresión)

En Shabat Jazon (el Shabat anterior al ayuno del 9 de Av) leímos en la Haftará el primer capítulo del libro Ishaya (Isaías). Ishaya todo él es consuelo (Baba Batra 14B), pero esa Haftará tal parece una dura crítica de Am Israel (el Pueblo de Israel). Los términos que utiliza el profeta son los más duros de los escritos. También la potencia y los detalles de las descripciones son muy contundentes: “¡Ay de la nación pecadora, del pueblo cargado de iniquidad, simiente de malhechores, hijos corruptos! Han abandonado al Eterno, han despreciado al Santo de Israel, se han vuelto atrás” (Ishaya 1:4). Y la cima: “¡Oíd la palabra del Eterno, magistrados de Sdom! ¡Escuchad la ley de nuestro D’s, oh pueblo de Amora!” (Ishaya 1:10). Tal parece que nos encontramos al borde de la desesperación – pero no debemos olvidar que es un profeta el que nos habla, y las palabras del profeta no son expresiones de frustración ni pérdida de esperanzas. Los ojos del profeta saben mirar a las profundidades, a un lugar que los ojos humanos corrientes no saben siquiera que existe, pero es él el que determina la realidad. Rabí Meir aprende justamente de esos versículos el gran valor de Am Israel: “‘Hijos sois del Eterno, vuestro D’s’ (Dvarim 14:1) – cuando ustedes se comportan como hijos, son llamados ‘hijos’. Cuando ustedes no se comportan como hijos, no son llamados ‘hijos’, dice Rabí Iehudá. Rabí Meir dice: De una forma u otra ustedes son llamados ‘hijos’, como dice el versículo ‘simiente de malhechores, hijos corruptos’ (Ishaya 1:4)” (Kidushin 36A).
Ishaya vivió en la época en que la situación espiritual de Am Israel era muy baja – ya sea para con el prójimo como para D’s – y a pesar de ello, son llamados “hijos” de D’s. No es un trato preferencial o un perdón de concesión. “El culto a otros dioses hace concesiones” (Ierushalmi Avoda Zara 1:5), pero “todo el que dice que D’s concede – será cortada su vida” (Baba Kama 50A). D’s no se desentiende de nuestros pecados por el hecho de ser sus hijos, justamente al revés. El profeta determina que el vínculo con la orientación Divina es un vínculo potente, que no será borrado nunca. No será borrado porque es parte de nuestra vida. El ser hijos de D’s quiere decir que tenemos aptitudes Divinas, que tenemos la capacidad de dirigirnos y orientar toda la existencia a la meta para la cual todo fue creado – corregir el mundo con el Reinado Divino. También en épocas en que el comportamiento de Am Israel es muy incorrecto, todavía somos capaces y tenemos la obligación de crear una cultura nueva, de forjar caminos de vida que le permitan a la humanidad redimirse de todas las desgracias en las que se encuentra presa. Las duras palabras de Ishaya son producto de la fe plena en que somos “hijos”, la fe en que este pueblo es capaz de identificar la grandeza de su meta, y plasmarla.
Ishaya vivió en la época del rey Ajaz “Rav Una citando a Rabí Elazar dijo, ¿por qué se llamaba Ajaz? Porque tomó los Batei Knesiot (Sinagogas) y Batei Midrashot (centros de estudio de la Torá)” (Vaikra Rabah 11:7) [Ajaz en hebreo es “tomó”. N. del T.]. Ajaz libra una batalla cultural malvada contra los Batei Midrashot, una época sobre la que dicen nuestros sabios “no hubo un momento tan difícil como ese” (Vaikra Rabah 11:7). El profeta bien sabe cuán difícil y complicada es la situación, pero también sabe que nunca dejamos ni nunca dejaremos de ser Am Israel. Su clamor está lleno de amor y fe, y por ello los llama a arrepentirse: “Venid, pues, y arguyamos juntos, dice el Eterno. Aunque vuestros pecados fuesen como la grana, como la nieve serán emblanquecidos, aunque fuesen rojos como el carmesí, como la lana quedarán” (Ishaya 1:18). La crítica del profeta no tiene efecto sólo según lo que fue dicho, sino que principalmente según la grandeza del que lo habló, y su clamor no se desvanece en el aire, sino que es asimilado en los corazones. El profeta Ishaya, enseguida después del primer capítulo, tiene otra visión sobre Iehudá e Ierushalaim: “Y acontecerá que en los postreros días, el Monte de la Casa del Eterno será establecido como cabeza de los demás montes, y será ensalzado sobre los collados, y afluirán a él todas las naciones. Pues caminarán muchos pueblos y dirán: Venid, y subamos al Monte del Eterno, a la Casa del Señor de Iaacov, a fin de que Él nos enseñe en cuanto a Sus caminos, porque también nosotros queremos andar en Sus senderos. Entonces saldrá la Torá de Tzion, y de Ierushalaim la palabra del Eterno. Y Él juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos, y ellos romperán sus espadas para hacer de ellas azadones, y sus lanzas trocarán en podaderas, no alzará espada nación contra nación, ni aprenderán más la guerra” (Ishaya 2:2-4). Ishaya conduce a Am Israel de la bajeza de la época de Ajaz, a la elevada cima de la época del rey Jizkiau. “D’s se propuso hacer a Jizkiau Meshiaj (Mesías), y hacer de Sanjeriv Gog y Magog” (Sanhedrin 94A), esa proposición Divina nos enseña que la generación de Jizkiau se elevó a un nivel de vida muy semejante al que será alcanzado en el futuro. Esa “simiente de malhechores”, esos “hijos corruptos” demostraron que realmente son “hijos”, y lograron emblanquecer sus pecados como la nieve. Las profecías que hablan de los últimos días, que describen la superación de la realidad, son dichas justamente en esa generación, “y habitará el lobo con el cordero, y el tigre se acostará junto con el cabrito… y jugará el niño de pecho sobre el agujero del áspid, y el destetado pondrá su mano sobre la madriguera de la víbora. No obrarán mal ni destruirán en todo Mi santo monte, porque estará la tierra llena del conocimiento del Eterno, como las aguas que cubren el mar” (Ishaya 11:6-9).
Las visiones de los profetas no son versos emocionantes para suavizar la vida y aquietar la maldad, sus visiones son promesas absolutas, y nosotros tenemos la certeza que ninguna de sus palabras será en vano (bendiciones de la Haftará). “Y el redentor vendrá a Tzion, y a los que se vuelven de la transgresión en Iaacov, dice el Eterno” (Ishaya 59:20), una gueulá (Redención) que llega para los que se han vuelto de la transgresión a través de los discípulos de Ishaya, que saben que no hay ningún pecado que pueda estropear la santa cualidad de Israel.


Rav Shlomó Aviner

Destello de kdushá
Rav Shlomó Aviner

Pregunta: Escuché que en el post modernismo no hay ningún destello de kdushá (santidad), todo él es vacío y negativo. Pero también he leído que en todo hay algún destello de kdushá, y así también escribió el Rav Kuk en Shmona Kvatzim.
Respuesta: La cuestión es si para nosotros hay algún destello de kdushá o no. Porque por parte de D’s, en todo hay vitalidad Divina, porque de lo contrario no existiría, como dice el Ramba”m al principio de su libro Mishné Torá: Él hizo a todas las criaturas, y les da vida. Y como dice Nefesh HaJaim (Shaar 3, citando al Rokeaj), que D’s no creará una pared que obstaculizará su camino, y también en el momento en que la persona comete alguna trasgresión D’s le da vida y fuerzas, como dice el Rama”k al principio del libro Tomer Dvora.
Pero todo eso es por parte de D’s, pero por nuestra parte hay diferencias. A veces se puede disfrutar del destello de kdushá, y a veces no. El Rav Kuk lo aprende del comentario del Zohar al versículo: “No vendrá en todo momento al kodesh” (Vaikra 16:2). No siempre se puede allegar al kodesh, bendito sea, en todo tema (Pinkasei HaReaya 4, Pinkasei HaDapim 3 inciso 1, pág. 235). Y también menciona que hay cosas que son todas malas, y hay que aniquilarlas totalmente, y D’s se alegra con su exterminio (Orot HaKodesh Bet, pág. 291). Por ejemplo, escribe que no hay lo qué rescatar del cristianismo, y debes abominarlo, como la idolatría, con tajante antagonismo (Iguerot Dalet 176. Orot HaEmuna 36). Y en cuanto a Amalek, hay que borrarlo por debajo del cielo, pero hay un aspecto por encima del cielo que no debe ser borrado (Midot HaReaya). Cuando le preguntaron a nuestro Rav, el Rav Tzvi Iehudá cuál es la diferencia, dijo que no hay ninguna diferencia, es sólo una actitud distinta del pensamiento. Y ese fue el error de Shaul, que se fijó en el destello oculto en Agag y se apiadó de él, lo que generó una desgracia. Pero el profeta Shmuel degolló a Agag a filo de espada y le dio a las avestruces de comer trozos del cadáver (Olat Reaya, Purim).
El destello oculto le pertenece a D’s, o será revelado en el futuro, o los grandes pensadores deberán comprenderlo según lo esotérico. Pero tenemos prohibido mezclar lo evidente y lo esotérico. El post modernismo es como si llega alguien a matarte; no tiene sentido pensar en el destello oculto en su alma, sino que le disparas a matar. En Ein Ayá, en cuanto a “todo el que dice que Shlomó pecó…” es explicado que ese fue su error, que pensó que es posible ya revelar el destello de la kdushá que se esconde en la idolatría, lo que si bien es afín con su elevada alma, no es apto ahora para la totalidad genérica de Am Israel (el Pueblo de Israel) que fue ordenado: Destruye, quema y aniquila. Y también en Guinzei Reaya en cuanto a Janucá, se habla de rescatar los destellos de la kdushá de los griegos, que es una labor sólo para los grandes pensadores, y también ellos pueden ser dañados, como alguien que corre entre las gotas de lluvia para no mojarse.
Y es aclarado en Ein Aya que nuestros sabios pretendían censurar el libro Kohelet, no porque no fuese Kadosh, sino que pertenece al futuro y no al presente, por ello no querían tirarlo sino que ocultarlo hasta que llegue el momento adecuado, hasta que fue aclarado que hay en él alimento espiritual también para el presente.
En resumen, por parte de D’s hay un destello de kdushá en todo, y para nosotros en forma práctica a veces sí con mucho cuidado, a veces no, como con el post modernismo que hoy en día es un enemigo espiritual terrible.
Que seamos merecedores de añadir kdushá, más y más. 


Shabat

Meorot HaShabat

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Muktze
Cáscaras y huesos sobre la mesa

Cascaras de nueces y huesos sin restos de carne que no son aptos para ser comidos por personas o animales, son Muktze MeJamat Gufo, y está prohibido moverlos.
Si se juntaron muchas cascaras o huesos sobre la mesa, y le es inmundo para las personas que habitan en la casa dejar la mesa así, esas cascaras y huesos son considerados Geref Shel Rei, y por el respeto de las personas está permitido quitarlos de la mesa con las manos y tirarlos a la basura[1].

Ollas de cocinado sucias
Así también ollas cuyo principal uso es cocinar con ellas, y sólo a veces se las utilizan para guardar alimentos, son Muktze como todo Kli SheMelajto LeIsur[2]. Pero cuando las ollas están sucias con los restos de lo que fue cocinado, y es inmundo dejarlas sobre el mármol, está permitido quitarlas a un lugar donde no es utilizado [también cuando no es para utilizar la olla o el lugar donde se encuentra] [3].
No se hace Geref Shel Rei en un principio
Escribió el Shuljan Aruj que no se hace Geref Shel Rei en un principio en Shabat. Es decir, está prohibido dejar frente a él algo que sabe que finalmente le será inmundo, y se fía en que entonces estará permitido quitarlo por ello, como Geref Shel Rei que está permitido mover por el respeto de las personas[4].
Según ello escribieron los poskim que se debe sopesar lo que se acostumbra a hacer en las comidas de Shabat, que se pelan huevos, nueces, almendras y similares, cuyas cascaras son Muktze MeJamat Gufo, y a veces más tarde quitan las cascaras y las tiran a la basura, por ser consideradas Geref Shel Rei, y no dudan al respecto a pesar que generan Geref Shel Rei
en un principio[5].
Si colocan en un recipiente un trozo de pan, y cuando pelan los huevos o nueces ponen las cascaras dentro de ese recipiente, estará permitido moverlo con las cascaras en él, por el pan permitido, y por supuesto que en ese caso no se hace Geref Shel Rei en un principio en absoluto en Shabat[6].
A pesar que no se hace Geref Shel Rei en un principio, de todas formas si ya lo hizo, está permitido quitarlo[7].


[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 308, Mishná Brurá inciso 115). Y si hay pocas cascaras o huesos sobre la mesa, y necesita el lugar, puede sacudir el mantel o moverlos utilizando un objeto, como un cuchillo o un trapo [seco], porque de esa forma es considerado un movido lateral para algo permitido (allí, Mishná Brurá y Kaf HaJaim inciso 184). Y véase anteriormente que en opinión del Shuljan Aruj HaRav no es considerado movido lateral, y el cuchillo o el trapo son como una continuación de su mano, y es como si moviese las cascaras o huesos con la mano. Y véase más en Jazon Ish 47 inciso 14.
[2]Véase anteriormente en cuanto a los detalles.
[3](Allí, inciso 4. Biur Halajá comienza kli shemelajto leheter. Y Kaf HaJaim inciso 35).
[4](Allí, inciso 36). Y también si no lo hizo para quitarlo más tarde, pero es seguro que finalmente lo quitará, también está prohibido, porque a pesar que permitieron quitar algo inmundo, de todas formas provocarlo en un principio está prohibido (allí, Mishná Brurá inciso 139 [y véase Biur Halajá comienza kedei lehotzio] y Kaf HaJaim inciso 225. Y véase Shuljan Aruj HaRav allí, inciso 75).
[5](Véase Shuljan Aruj HaRav inciso 67. Y Aruj HaShuljan inciso 55).
Y en Shita Mekuvetzet (Beitza 21B, comienza veki osin) escribió en cuanto al pelado de almendras y nueces en la comida sobre la mesa: “¿Acaso se hace Geref Shel Rei en un principio?, es decir, cuando no es necesario. Pero si es necesario, por ejemplo para tirar cascaras y huesos que se encuentran delante nuestro cuando comemos, está permitido incluso en un principio”.

[6](Véase en Jatam Sofer, acotaciones al Maguen Avraham allí, inciso 51).
Así también puede pelar huevos directamente sobre la basura, sin apilar las cascaras sobre el mármol.

[7](Allí, Shuljan Aruj).