Edición semanal
Basada en materiales de Majón Meir

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Parashat Dvarim     9 de Av 5782     Shabat Jazon     1370 


9 de Av y Shabat
Rav Ioni Lavi

El 9 de Av es el día más duro del año. Cuando el calendario lo encuentra con la Reina Shabat – se genera desconcierto. ¿Qué se hace cuando el ayuno cae en el día que es una mitzva regocijarse? ¿Cómo debemos comportarnos cuando el duelo cae cuando debemos alegrarnos? Eso pasa bastante seguido, como en este año, y la resolución clara de la halajá judía entre esos dos polos genera pensamientos interesantes:
Antes que nada, en esa “pugna” entre el ayuno y el Shabat – este último vence: “Come y bebe todo lo necesario, y sirve en su mesa incluso manjares como el rey Shlomó en su momento” (Taanit 29B). ¿Y qué hay con el ayuno? La halajá judía determina que es aplazado al domingo. El sentido claro para nosotros es: Cuando se enfrentan distintas fuerzas en el mundo, está claro quién vence. El bien finalmente desplazará al mal, y la alegría triunfará sobre la tristeza.
En segundo lugar, la halajá también determina que mientras las cosas buenas siempre son adelantadas – por ejemplo, cuando Purim cae en Shabat se lee la Meguila el viernes anterior – y las cosas malas son aplazadas: “No se adelantan las desgracias” (Meguila 5A). Por detrás de esa determinación se encuentra un profundo mensaje: El bien es lo central en la vida, tiene esencia propia. Y por lo tanto cuanto más temprano se revele, mejor. Y el mal, en contraste, es aleatorio, pasajero, y finalmente será anulado. Por ello, preferiremos siempre demorarlo, y en secreto en nuestro corazón tendremos la esperanza que seamos merecedores que mientras tanto sea anulado totalmente.
El tercer punto que nos revela el encuentro entre el 9 de Av y Shabat es la profunda comprensión en cuanto a la esencia del duelo en ese día. Es cierto, es un día terrible en el que Am Israel (el Pueblo de Israel) recibió un fuerte golpe. Pero no se trata, D’s no lo permita - de un abandono y rechazo por parte de D’s para con sus hijos. Por el contrario: La destrucción del Beit HaMikdash (El Templo) fue un tipo de operación de emergencia, en base al amor, y su meta era salvar a Am Israel. Destruir las piedras y los árboles para “limpiar” el lugar, y permitirle al pueblo reponerse y comenzar nuevamente.
Lo diremos de esta forma: La Reina Shabat es el alma del dolorido cuerpo, cuyo nombre es 9 de Av.
Todo eso nos conduce a un rezo especial: ¡Haznos merecedores este año, Señor del Mundo, de comer y beber y regocijarnos en el 9 de Av! Por favor, permítenos hacerlo también en los años venideros, cuando el día de duelo se transforme en día de alegría, y seremos merecedores de comer en todo 9 de Av, justamente como este año, con alegría y con buen corazón, con el regreso de tu Shjina (manifestación de la Presencia Divina) a Tzion.


Rav Shlomó Aviner

¿Se puede comer pollo?
Rav Shlomó Aviner

Pregunta: Hay Rabanim (Rabinos) que prohíben comer pollo en nuestros días, porque las gallinas que tenemos, llamadas “gallinas de crianza” son una cruza de las gallinas que eran comidas a lo largo de las generaciones según la tradición, con gallinas que no eran comidas y no tenemos tradición al respecto. ¿Qué se debe hacer?
Respuesta: La respuesta se divide en tres:
1. ¿Acaso se puede comer un tipo de ave sobre la cual no tenemos una tradición, pero es similar a un ave que tenemos tradición que está permitido comer?
2. ¿Se puede comparar gallinas de crianza al pavo?
3. Si los poskim (sabios que determinan la halajá) discrepan, ¿es conveniente ser más estricto y no comer pollo?
Aclararemos cada punto:
1. La Torá nos proporciona una lista entera en el libro Vaikra (Levitico, 11:13-23) y en el libro Dvarim (Deuteronomio, 14:11-20) de aves impuras. En la Gmará (Julin 63B) dice Rabí Iehudá: “Sabía el Creador del Mundo que las aves puras son más que las impuras, y por ello enumeró las impuras”. Es decir, la mayoría de las aves son Kasher y está permitido comerlas, y por ello la Torá listó las aves impuras. Y a pesar de ello, no siempre es fácil determinar qué tipo de ave es permitido, y cuenta el Midrash que “Moshé tomaba el animal y le mostraba a Israel y les decía; este se puede comer, este no se puede comer” (Sifra Shmini, 2:2).
Por ello nuestros sabios determinaron señales de pureza en las aves. En el Shuljan Aruj (Iore Dea 82 inciso 2) está escrito: “Hay tres señales de pureza; un dedo agregado (por encima de los otros), zefek (buche, lo que es llamado en la Torámurah” (Vaikra 1:16). Es un órgano interno como un tubo donde es almacenada la comida antes de ser digerida), y su kurkevan (molleja) puede ser pelada con la mano”. Hay también señales de impureza en las aves: Si es ave de rapiña (Julin 49A), es decir clava sus uñas en la presa e incluso comienza a comerla cuando todavía está en vida (Rabeinu Tam, Ramba”n, Ramba”m y más). Cuando se les tira comida, la toman todavía en al aire (a diferencia de las aves puras que la deja caer al suelo, y solo después la comen). Y cuando se tensa un hilo frente a ellas las aves impuras se paran en él agarrándolo con los dedos divididos en forma igual de ambos lados del hilo (Julin, allí).
Pero Am Israel (el Pueblo de Israel) acostumbraron a no comer aves fiándose solamente en las señales, sino cuando tenemos una tradición de nuestros antepasados que ese ave es pura y se acostumbró a comerla (Ram”a, Iore Dea 82, inciso 3). Rashi cuenta que en la época de nuestros sabios acostumbraban a comer un ave determinada según las señales de pureza, y luego de un tiempo vieron que ese ave clava sus uñas en su comida, como las aves impuras. Entonces fue aclarado que la verificación de las señales no era suficientemente clara, y desde ese entonces se acostumbra a no comer aves que no tenemos una tradición clara de nuestros antepasados que se come de ella.
En cada generación los sabios fueron preguntados en cuanto a algún ave que no conocían anteriormente, si es del tipo de una de las aves que ya acostumbraron a comer, y está incluida en la tradición que tenemos en cuanto a las aves que conocemos. O quizás se trata de otro tipo de ave, y de momento que no tenemos ninguna tradición al respecto que sea pura, no se debe permitir comerla.
En Shu”t Jatam Sofer (Iore Dea 75) escribió que no es necesario tener alguna tradición en cuanto a todo tipo de ave, alcanza con que sea similar a un tipo de ave que se acostumbra a comer, y es Kasher. A no ser que tenga alguna diferencia notoria, y en ese caso puede que se trate de otro tipo de ave. Y así también opina Avnei Nezer (Iore Dea 75).
Y en cuanto nuestro tema, los gallinas de crianza son bastante parecidas a los tipos de gallina acostumbrados a comer.
2. El pavo fue traído de América a Europa. Por supuesto, no llegó de América con alguna tradición, ya que en ese entonces no había ninguna comunidad judía allí. En los libros de los poskim se habla que no se sabe en forma clara por qué se difundió la costumbre de permitir comerlo, pero de momento que esa es la situación, los poskim solo hablaron si es correcto o no. En Shu”t Meshiv Davar (2:22) el Netzi”v (Rav Tzvi Iehudá Naftali Berlín) escribió que a pesar que nuestra costumbre es que no comemos aves sobre las que no tenemos alguna tradición, eso se refiere solo a aves nuevas, que aceptamos no decidir por nosotros mismos si son Kasher o no. Pero no aceptamos dejar de comer aves que ya se acostumbró a comer sólo porque no tenemos alguna tradición al respecto. Por lo tanto, la gran mayoría de los poskim
permiten comer pavo. Y también el Gaón, el Rav Iosef Dov Solovietchik comía pavo (Nefesh HaRav, pág. 231). Es cierto que hay quienes no comen hasta hoy en día, como familias que son descendientes del Shl”a y jasidim de Breslav. Y también escuchamos que el Gaón, el Rav Tzvi Shijter, de los directores de Ieshive University evita comer pavo (y véase una lista de poskim al respecto en Darkei Tshuvá, Iore Dea 82).
De todas formas, se puede permitir comer gallinas de crianza con mucha más facilidad que el pavo, ya que el pavo se ve muy distinto de las gallinas, lo que no es así tratándose de gallinas de crianza, que son muy parecidas a la gallinas que son comidas.
3. El tema de ser más estricto es mencionado en el libro Mesilat Iesharim sólo en el capítulo que habla del ascetismo (cap. 14). El ser más estricto en el cumplimiento de las mitzvot es mencionado allí sólo como una parte del ascetismo, que comprende también otras partes: Prescindir de todo placer que no es necesario en la vida, ser siempre más estricto todo lo posible, y consagrar todo el tiempo al culto a D’s. Entonces, no está claro que nosotros nos encontramos en ese nivel para que seamos más estrictos. Y los grandes sabios de Israel utilizaron esa idea, como en la Gmará (Julin 105A), cuando dijo Mar Ukva: Yo soy como vinagre de vino en comparación con mi padre. Porque mi padre cuando comía carne esperaba 24 horas antes de comer productos lácteos, pero yo espero sólo hasta la próxima comida. Y debemos preguntar, ¿por qué Mar Ukva no hizo como acostumbraba su padre, de momento que es una buena costumbre? Pero es que entendió que si desea ser más estricto en cuanto a la separación entre carne y leche, debe serlo también en otros temas, y no era capaz de ello (el Gaón, el Rav Iaacov Kaminetzki, BeMejitzat Rabeinu, pág. 90. El Gaón, el Rav Shlomo Zalman Oirvaj, VeAleu Lo Ibol, tercera parte, pág. 59-60. El Gaón, el Rav Iosef Shalom Eliashiv, Mishnat Ish, pág. 5-8, 220).
Y por supuesto que no se debe ser más estricto a expensas de su esposa e hijos.
Por ello, como en toda diferencia de opinión entre los poskim, decimos que cada uno debe utilizar la gran regla: Hazte un Rav. Y el que no tiene Rav, por supuesto que puede fiarse de los que permiten comer ese pollo. Y entre los que lo permiten hay grandes poskim, como el Gaón, el Rav Shmuel HaLevi Vozner (Shu”t Shevet HaLevi, 10:113), el Gaón, el Rav Moshe Iuda Leiv Landau (que era el Rav de Bnei Brak), y el Gaón, el Rav Moshe Shterenbuj (Shu”t Tshuvot VeHanagot, 4:184). 


Shabat

Meorot HaShabat

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Muktze
Movido de las velas después que se apagaron

El candelabro y la bandeja sobre los que se encienden las velas de Shabat son base de algo prohibido, y está prohibido moverlos también después que las velas se apagaron como fue aclarado anteriormente.
En muchos lugares los candelabros sobre los que se encienden las velas de Shabat se encuentran sobre la mesa donde se come, y durante el Shabat luego que las velas se apagaron desean quitarlos de la mesa[1]. Los poskim (sabios que determinan la halajá) discrepan en cuanto si se puede condicionar en vísperas de Shabat para permitir mover el candelabro y la bandeja luego que las velas se apagaron o no.

Condición
Escribió el Shuljan Aruj que cuando hicieron una condición en vísperas de Shabat que podrán mover las velas luego que se apaguen, la condición es válida y está permitido moverlas[2].
A pesar que el candelabro y la bandeja sobre los cuales las velas de Shabat están encendidas a la entrada del Shabat se transforman en base de algo prohibido – la llama - y también después que las velas se apagaron está prohibido moverlos, ya que la regla en cuanto a Muktze es que lo que era Muktze a la entrada del Shabat está prohibido moverlo todo el Shabat [también después que ya no existe la razón por la que es Muktze][3], de todas formas si hizo una condición en vísperas de Shabat que desea moverlos luego que las velas se apaguen, está permitido moverlos, de momento que también a la entrada del Shabat no lo apartó de su pensamiento, ya que pensaba moverlos más tarde[4].
Esa condición tiene vigor sólo cuando se trata de las velas y el candelabro que no se los puede mover por ser base de la llama, ya que la llama se apagará durante el Shabat [porque el aceite o la parafina se consumirá y terminará]. Pero tratándose de otra base de algo prohibido, la condición no tiene vigor, y no se puede condicionar que pueda moverlo luego que sea quitado el Muktze, y si a la entrada del Shabat el Muktze se encontraba sobre la base, ella queda prohibida durante todo el Shabat[5].
El Ram”a escribe que la costumbre es que también tratándose de velas la condición no tiene vigor, y ningún judío puede mover las velas luego que se apagaron. Pero esa condición es válida para permitirle a algún gentil moverlos[6].


[1]Véase anteriormente en cuanto a clocar la Jala sobre la bandeja para que sea considerada base de algo permitido. Y véase también allí en las acotaciones en cuanto si cuando mueve la bandeja el objeto permitido debe encontrarse sobre ella o no.
[2](Shuljan Aruj, Orej Jaim 279 inciso 4). Y está permitido moverlo para utilizarlo u utilizar su lugar, ya que el condicionado ayuda a que no sea considerado base de algo prohibido, pero todavía las velas y el candelabro son Kli SheMelajto LeIsur [véase 279 inciso 6, Mishná Brurá inciso 19 y 23. 308, Mishná Brurá inciso 34], y se lo puede mover sólo para utilizarlo u utilizar su lugar. Y a veces el candelabro está prohibido moverlo de todas formas, porque es Muktze MeJamat Jisaron Kis, y se debe preguntar a un sabio.
Y en Kaf HaJaim (allí, inciso 15) citó a Birkei Iosef que así es la costumbre de los Sfaradim, que hacen un condicionado en víspera de Shabat para permitir moverlos después que las velas se apaguen.
Y también citó en Kaf HaJaim (allí, inciso 17 y 18) a Birkei Iosef (inciso 5 y 6) que el que lo mueve basándose en un condicionado que hace para todo el año tiene en quién fiarse, y puede que incluso si no hizo ninguna condición esté permitido moverlo, de momento que todos acostumbran a condicionar y moverlos, y es como si hubiese condicionado él también que bajo esas condiciones prende las velas.

[3](Véase anteriormente).
[4](Allí, Shuljan Aruj. Y también Shuljan Aruj HaRav inciso 5).
[5](Allí, Maguen Avraham inciso 6, fue citado por Mishná Brurá inciso 11 y Kaf HaJaim inciso 20).
Y véase Kaf HaJaim que escribió que una vela que arde durante mucho tiempo, como una vela de recuerdo del difunto, no se puede condicionar para poder moverla si se apagó durante el Shabat, porque no es previsto que así ocurra. Y véase Pri Megadim (Eshel Avraham inciso 6) y Mishná Brurá (inciso 14).

[6](Allí, Ram”a). Y no está prohibido decirle a un gentil que lo haga, ya que se fía en la opinión de los que dicen que el condicionado es válido (allí, Mishná Brurá inciso 14). Y el condicionado es válido para permitir que el gentil mueva el candelabro [luego que las velas se apagaron] incluso del sol a la sombra, para que no sea robado. Pero para utilizarlo u utilizar su lugar, está permitido a través del gentil incluso sin condicionado (allí, Mishná Brurá inciso 13 y 14. Kaf HaJaim inciso 24 y 26. Y véase también 276, Mishná Brurá inciso 31).
También escribió el Ram”a que de momento que la costumbre es moverlos luego que las velas se apagaron a través de un gentil, es como si hubiese condicionado en un principio. Y Pri Megadim (allí, Eshel Avraham inciso 6) escribió citando a Ba”j que cada persona debe condicionar en forma explícita en vísperas de Shabat, que no piensa apartar de su pensamiento el candelabro y el aceite sólo cuando las velas arden, y así escribió Shuljan Aruj HaRav, que es bueno condicionar en forma explícita. Y Kaf HaJaim (allí, inciso 25) citó el Ba”j y escribió que la gente acostumbra como dice el Ram”a, que es como si hubiesen condicionado en forma explícita.