Edición semanal
Basada en materiales de Majón Meir

Anterior | Posterior | Archivo | Imprimir | Página inicial


Parashat Ekev     22 de Av 5781     1319 


Rav Shlomó Aviner

Iniciativa y fe
Rav Shlomó Aviner
(Tal Jermón – Torá. Pág. 305)

Ensimismados en las tareas del asentamiento y construcción de la tierra, se puede llegar a una situación de embriaguez y olvido: “No suceda nunca, cuando hayas comido y te hayas saciado, cuando hayas edificado para ti casas buenas y hayas habitado en ellas... de manera que te digas en tu corazón; mi poder y la fuerza de mi mano me ha procurado esta riqueza. Antes bien, te acordarás del Eterno, tu D’s, porque Él es quien te da fuerzas para hacer” (Dvarim 8:12-18). Esos versículos expresan tajantemente la problemática de la iniciativa y acción humanas. A primera vista, se está negando la iniciativa del hombre y el fomentado de la capacidad humana: Todo el éxito depende de D’s. Él tiene fuerza, Él hace, Él bendice con el éxito la realidad – y todo intento de hacer responsable de ello al hombre, no es más que una ilusión hereje. Así parece a primera vista. Por otro lado, una concepción como esa nos educa a ser holgazanes y dejar de lado las capacidades humanas: ¡Si D’s lo hace todo, nosotros podemos descansar! Es semejante a la concepción fatalista, según la cual todo está determinado desde un principio, y de esa forma se llega a una justificación filosófica de la holgazanería: ¿Para qué esforzarse? ¡De todas formas, ya fue predestinado que las cosas serán de una forma u otra! Y en efecto, una de las consecuencias indeseables del Temor a D’s que no fue elaborado es la holgazanería. La vinculación con D’s y la fe, son confundidas con la holgazanería (prólogo a Musar HaKodesh).
¡Pero no es así! ¡Por supuesto que se debe ser consciente que “mi poder y la fuerza de mi mano me ha procurado esta riqueza”! De la misma forma que la edificación nacional, militar y económica debe ser realizada a alto nivel, lo más sofisticado posible, también es necesario que detrás de esa edificación se encuentre la certeza que somos capaces de hacerlo, que somos fuertes y tenemos una potencia civilizadora y tecnológica que nos permitirá alcanzar esos elevados logros, en todos los aspectos.
Por ello, no sólo que no está prohibido decir “mi poder y la fuerza de mi mano me ha procurado esta riqueza”: ¡Por el contrario, es una mitzva decirlo! (Darshot HaRan, Drush 10). Debemos ser conscientes de nuestras capacidades. Esa conciencia es también parte de nuestra obligación en la guerra: El cobarde que atemoriza a sus hermanos, les hace sentir debilidad e inseguridad en la guerra – comete un pecado grave (Dvarim 20:8). El Cohen Mashuaj (sacerdote que sale al frente de las huestes), en contraste, le dice al pueblo: “Oye, oh Israel, vosotros os acercáis hoy para pelear contra vuestros enemigos. No desmaye vuestro corazón, no temáis ni os alarméis, ni os acobardéis a causa de ellos” (Dvarim 20:3).
Entonces, ¿cuándo se vuelve negativa la sensación de fuerza y potencia? Cuando surge de la arrogancia, que hace olvidar. Cuando “se ensalce tu corazón, y te olvides del Eterno, tu D’s” (Dvarim 8:14), y en base a ello “digas en tu corazón; mi poder y la fuerza de mi mano me ha procurado esta riqueza” – allí se encuentra el pecado.
De ese versículo aprendemos cuán severa es la arrogancia: Ella conduce al olvido de D’s. Rabí Moshé de Kutzi – autor del libro “Sefer Mitzvot Gadol” – cuenta que después de haber enumerado en su libro todas las 613 mitzvot, según sus criterios, le fue dicho en sueños que omitió lo principal: ¡El olvido de D’s! (Al final de la introducción. Y también allí, preceptos negativos 64). La Gmará (Sota 5A) nos enseña que la prohibición de la arrogancia emana de la prohibición de olvidar a D’s: “¿Cómo sabemos que está prohibido enorgullecerse? Porque el versículo dice ‘se ensalce tu corazón, y te olvides del Eterno, tu D’s’”. La arrogancia y el olvido de D’s – son una misma cosa.

Pregunta: ¡¿Qué relación hay entre ellas?! ¿Cómo conduce la arrogancia al olvido de D’s?
Respuesta: La humildad – la virtud opuesta a la arrogancia – es en dos campos. El primero, en el plano social, entre la persona y su prójimo: La persona humilde no se enorgullece frente al prójimo, sino que está dispuesta a descender a su altura y ayudarlo. Como el cuento de Einstein – el científico genio judío – que le ayudó a una niña pequeña a hacer sus deberes de matemáticas. El segundo plano, es frente a D’s. Ser humilde, es ser consciente que todo lo que tenemos dentro nuestro proviene de D’s, como dice Rabí Iehudá HaLevi: “Todo proviene de Él, y no de nosotros” (HaKuzari 2:50). Hay que ser consciente que D’s es el origen de todas las fuerzas y talentos que hay dentro nuestro: “Antes bien, te acordarás del Eterno, tu D’s, porque Él es quien te da fuerzas para hacer”.


Rav Shlomó Aviner

Anhelación de la salvación
Rav Shlomó Aviner

¿Por qué anhelamos el Meshiaj (El Redentor)? ¿Para nosotros? ¿Para que solucione nuestros problemas? No, sino que para que podamos rendirle culto a D's como corresponde con tranquilidad (Ramba"m, Hiljot Melajim al final del cap. 12. Hiljot Tshuvá al final del cap. 9).
Una de las primeras preguntas que le hacen a la persona en el Cielo es "anhelaste la salvación" (Shabat 31A). Pero ¿qué quiere decir anhelar la salvación? Explica el Rav Kuk que el anhelo de la salvación incluye dos cosas: Tener fe que la salvación llegará, también cuando se ve lejana. Y el análisis continuo de la realidad, de los acontecimientos, y cuando hay una oportunidad de que haya alguna salvación, enseguida actuar para ella (Ein Ayá allí. Olat Reaya en cuanto al anhelo de la salvación en el rezo de Shmona Ezre).
También el Ramba"m escribió que la fe en el Meshiaj incluye dos cosas: "Y todo el que no cree en él, o no espera su llegada, no sólo en los demás profetas no tiene fe, sino que no tiene fe en la Torá de nuestro Rav Moshé, ya que la Torá lo atestiguó diciendo 'y el Eterno, tu D's, devolverá tus cautivos y se apiadará y volverá a reunirte'…" (Ramba"m, Hiljot Melajim 11:1). O sea, no alcanza con creer en él, sino que también hay que esperarlo. ¿Qué es esperarlo? Cuando con la bondad Divina se abre alguna oportunidad de regreso y reunión, debemos enseguida sacrificarnos por la aliá (inmigración a Israel), la edificación de la tierra y todo lo demás.
Rav Jaim de Brisk pregunta ¿por qué sólo en cuanto al principio de fe en el Meshiaj está escrito "y a pesar de que se demora, lo esperaré todos los días", y no hay una formulación como esa en cuanto al resto de los principios de fe? Ni tampoco fue escrito "yo tengo fe a pesar de que hay muchos cuestionamientos y problemas".
Él explica un gran principio, que no hay aquí cuestionamientos, sino que esa es la esencia de la fe en el Meshiaj, es parte de la fe en él, que hay complicaciones y dificultades y acontecimientos imprevistos.
O diciéndolo de otra forma: "El hijo de David no llega sino que de improviso" (Sanhedrin 97), es decir, no justamente de la dirección esperada.
Bienaventurados somos que fuimos merecedores.


Shabat

Meorot HaShabat

El cometido de esta sección es familiarizar a los lectores con las pautas básicas del Shabat. Cada uno debe aconsejarse con la autoridad rabínica en su comunidad en cuanto a los detalles de las numerosas y a veces complejas halajot del Shabat, y no limitarse a lo escrito en esta sección.
Construcción
Tamaño de la carpa

El tamaño de la carpa en cuanto a la prohibición de edificación en Shabat es un palmo [porque ese es el tamaño mínimo en cuanto a impureza]. Por lo tanto, el que tiende sábanas o lonas de forma que arma una carpa fija, a pesar de que no las tiende sobre un lugar grande, sino que solamente un palmo, comete una trasgresión de la Torá escrita[1].
Por lo tanto, una viga que tiene un palmo de grosor o más[2], está prohibido en Shabat colocarla sobre otros palos o vigas delgados alejados unos de otros[3] para que proteja del sol, porque de momento que la viga tiene un palmo de grosor haciendo eso trasgrede la prohibición de armar una carpa en Shabat[4].
Nuestros sabios decretaron que esté prohibido armar una carpa incluso si es más pequeña que un palmo [no sea que llegue a hacer una carpa fija] [5].

Volumen de un palmo
Cabe hablar de una carpa sólo cuando esta se encuentra sobre un espacio que tiene por lo menos un palmo, pero si es menor que ello no se trata de una carpa en absoluto[6].
Por ejemplo: Una piscina o mikve que están llenas de agua, y desean tender sobre el agua una lona o similar [para que no caigan en el agua moscas o basuras], si la piscina no está llena del todo y luego de tender la lona quedará un espacio de un palmo de alto entre el agua y la tela, está prohibido en Shabat tenderla, porque de esa forma arma una carpa. Pero si la piscina está llena de agua de forma que luego de tender la lona no quedará un espacio de un palmo de alto, está permitido tenderla[7], porque de momento que no hay un volumen de un palmo de alto no es considerado una carpa en absoluto.


[1](Shuljan Aruj, Orej Jaim 315, inciso 8). Y por ello una carpa que está hecha en pendiente, en cuya punta no hay un palmo de grosor, y también tres palmos por debajo de la punta no hay un grosor de un palmo, no está prohibido según la Torá escrita armar, sólo según nuestros sabios. Y véase la próxima acotación.
Un palmo es 8cm según la opinión del Gaón, Rav Jaim Nae, y 9.6cm en opinión del Jazon Ish.

[2]E incluso tratándose de una viga que no está prohibido moverla por ser muktze, por ejemplo si la destinó a esos efectos antes de Shabat, de todas formas estará prohibido por ser armado de una carpa, como fue aclarado.
[3]Es decir, las vigas están alejadas una de la otra más de tres palmos. Pero si están tan cerca que entre ellas hay menos de tres palmos, son consideradas como si estuviesen unidas por Lebud, y ya son una carpa, y no estará prohibido colocar sobre ellas la viga en Shabat.
[4]Véase Mishná Brurá (allí, inciso 16) y Shaar HaTziun (inciso 20) y Kaf HaJaim (inciso 27) opiniones de los Ajaronim en cuanto a tender una esterilla enrollada, cuando el enrollado es más ancho que un palmo.
[5](Allí, Mishná Brurá inciso 35). Y véase Mishná Brurá (allí) y Kaf HaJaim (inciso 55) que esa es la opinión del Ri”f y el Ramba”m y Rabeinu Jananel. Pero la opinión de Rashi y Ro”sh que cuando no tiene un palmo en el techo no es considerado una carpa en absoluto, e incluso según nuestros sabios no lo prohíben. Y en Pri Megadim escribió que también Rashi y Ro”sh aceptan la opinión del Ramba”m en ese caso, y es considerada una carpa fija porque la hizo para que quede así por varios días.
[6](Allí, inciso 13. Mishná Brurá inciso 49).
Ese palmo, es un palmo por un palmo por un palmo de altura, es decir, un palmo cúbico (allí, inciso 3. Mishná Brurá inciso 49. Biur Halajá inciso 3, comienza dapin majubarim).
Cuando el espacio está lleno de objetos que lo reducen, se está hablando de un palmo cúbico por encima, donde está vacío (allí).

[7]Es decir, lonas que esa es su intención, y no le importa que se mojen y no tiene intención de exprimirlas (320 inciso 15. Mishná Brurá inciso 43).
Un barril grande, o utensilios grandes que dentro de ellos hay alimentos o bebidas, y sobre ellos hay un espacio libre de un palmo de altura o más, está prohibido taparlos en Shabat con una prenda o similar, de forma que tapa todo el utensilio. Así también, si están cubiertos antes de Shabat, está prohibido en Shabat quitar su cobertura, porque de momento que el barril o el utensilio es muy grande es como una carpa (315 inciso 13).
El Shuljan Aruj determinó en cuanto a ello como muchos Rishonim que lo prohíben, como fue aclarado. Pero la opinión del Raaba”d y Rashb”a es que no está prohibido. Y escribió Shuljan Aruj HaRav (315 al final) y Mishná Brurá (inciso 49) que lo correcto es ser más estricto como el Shuljan Aruj que es la opinión de la mayoría de los Rishonim, pero el que acostumbra a ser menos estricto no se lo amonesta, porque tiene en quién fiarse. Y el que desea taparlos, dejará parte del barril o del utensilio destapado.